En la Carretera Nacional VI, sentido Segovia, después de sobrepasar el Alto del León y abandonar la provincia de Madrid, iniciamos descenso del Puerto y encontramos, después de unos cientos de metros, a nuestra derecha, junto a una gran curva, sobre el Km. 58, los restos de una Caseta de Peón Caminero.
Nostalgia de tiempos pasados, reliquias que nos empeñamos en olvidar, sin darnos cuenta de que con ellas se
va también una parte de nuestra historia.
Actualmente en ruinas, solamente quedan en pie sus muros maestros, testigos mudos del paso del tiempo, atalaya desde la que, como antaño, se pueden divisar con claridad todos los montes cercanos.
A pesar de nuestro olvido, esta triste edificación, o lo que ya queda de ella, parece resistirse a morir y se empeña en recordarnos: “A San Rafael 5 Kms.” “A Villacastín 28 Kms.”
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J.Alonso Segoviano en el exilio
Seria un buen enclave de torre de vigia contra incendios , asi a parte de conservar vestigios se le sacaria utilidad
Bonito y curioso reportaje Alfonso. El toque de blanco y negro hace que nos sea mucho más fácil echar la vista atrás. Nunca está de más recordar como eran las cosas no hace mucho, para que así quizás seamos capaces de valorar todo eso de lo que ahora disfrutamos con un menor esfuerzo y una mayor comodidad.
Un saludo muy cordial desde Segovia.-
Podría tener multitud de utilidades por u punto estratégico, pero no le debe interesar a nadie, J. Alonso.
Patricia, me alegro de que te haya gustado. Tras pasar la Caseta, en la misma curva, hay una entrada para vehículos por la derecha. La zona merece la pena ser visitada.
AmerBik, amigo, siempre puntual y oportuno.
Un abrazo cariñoso.
Amigo Luis, hasta donde alcanzo a conocer, en estas casetas solía vivir, incluso con sus familias, el encargado de mantener en buen estado los tramos de carretera que de él dependían. Tenían las herramientas y materiales necesarios para cumplir con sus deberes, pero hace años se tiraba mucho de pico y pala.
Un abrazo para Ávila.
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Alfonso he de decirte que estas edificaciones eran más conocidas como "casillas de camineros" que como casetas y efectivamente vivian con sus familias. Las habia de 1 vivienda o de dos.Estas casillas solían tener una fuente cerca y normalmente contaban con un huerto ya que el sueldo de caminero era mínimo.En la actualidad, los pocos camineros que quedan estan reunidos en parques de viviendas. El cuerpo de Camineros del Estado fue declarado a extinguir en 1994. Un saludo.
Amigo E.R., muchas gracias por tu información, que me resulta de mucho interés.
Siento no poder cambiar el título de esta entrada (casilla), pero lo haré gustosamente en mi blog.
Un abrazo.
Encantado, Opinica y gracias por tu amable ofrecimiento. Nostálgicos recuerdos y duras vivencias, me imagino, aunque es probable que bajo el prisma de un jovenzuelo fuera distinto.
Un abrazo
Opinica, no sabes cuanto te agradezco que me hagas partícipe de tu vivencias. Me encanta conocerlas. Siempre estoy interesado en conocer el origen de chozos, fuentes, refugios, casas antiguas, cuyo abandono intento denunciar humildemente.
Con tu permiso doy traslado de tus comentarios a mi blog. Muchas gracias y un fuerte abrazo.
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