Ropa contra el frío, ¿funciona la teoría de las capas?

¿Eres de los que ya se ha preparado para vestirse como una cebolla? ¡Atento porque no es la mejor solución!

Javier Vegas

Javier Vegas

Con la llegada del frío son muchos los que van sacando prendas del armario como si no hubiera mañana, y se las colocan una encima de otra, como si de una cebolla se tratara. A esto se le conoce como teoría de las capas, pero, ¿es cierto que a más capas pasaremos menos frío?

Cuando nos vestimos a capas, o más popularmente como una cebolla, tenemos que tener cuidado con el número de prendas que llevamos, de qué materiales son, y qué tipo de ejercicio vamos a realizar. Si llevamos varias capas que no son transpirables, al mínimo ejercicio físico vamos a sudar, por lo que acabaremos pasando más frío.

Ropa contra el frío: La teoría de las tres capas

Si hemos decidido que no queremos pasar nada de frío y optamos por ponernos varias capas, entonces debemos hacerlo bien. Te presentamos la teoría de las 3 capas: interior + aislamiento + protección, un método con el que sentirás cómodo, no sudarás, y no pasarás frío.

Capa interior

El objetivo de esta capa es regular la temperatura y alejar la humedad. Para ello hay que utilizar camisetas térmicas, que están preparadas para mantener el calor corporal y aislarte del frío. Según la temperatura exterior, podemos elegirlas más o menos gruesas.

Capa de aislamiento

Esta segunda capa mantiene el calor y evita el enfriamiento de tu cuerpo. Normalmente suelen estar fabricados con tejidos transpirables y aislantes y es recomendable que sean ligeros para una mayor facilidad de movimiento en las extremidades.

Capa de protección, la más importante de las capas de ropa contra el frío

En esta tercera capa debemos utilizar un cortavientos que te proteja de la humedad y el viento. Los poros del tejido permiten que el cuerpo transpire.

Por lo tanto, debemos elegir una vestimenta que mantenga nuestro cuerpo seco, evitando tanto la condensación de nuestro sudor como que la lluvia y la nieve nos moje. Luego tenemos que ser nosotros los que nos ajustemos las capas a nuestra medida en función de la meteorología del momento o el esfuerzo físico que vayamos a realizar.

Si vamos a realizar deporte a bajas temperaturas otra opción es la 2+3, es decir, usar una primera capa y directamente sobre ella una chaqueta con tejido interno térmico. De esta forma, nuestro cuerpo transpira, nos aislaremos del viento, y tampoco pasaremos demasiado calor.