10 aspectos positivos de la lucha contra el cambio climático este 2021

En 2021 ha crecido la lista de acciones para frenar el cambio climático de origen humano. Estas son 10 de ellas en tono positivo que ayudarán.

Mario Picazo

Mario Picazo

Cada año hacemos balance de los principales acuerdos que se ponen en marcha para frenar el cambio climático de origen humano. Acuerdos que se traducen en acción y que reflejan los aspectos positivos de esa lucha. Pero lo importante al final es que lleguen a buen puerto y se acaben cumpliendo. 

Los aspectos más positivos de la acción contra el cambio climático suelen estar relacionados con la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. También suma a la causa el reducir la deforestación o potenciar las energías renovables a gran escala entre otras muchas acciones. 

1 – Un pacto histórico para frenar la deforestación

Líderes de más de 100 países del mundo se han comprometido este año a detener y revertir la deforestación y la degradación del suelo. Lo hicieron en el marco de la Cumbre del Clima (COP26) celebrada en Glasgow este mes de noviembre. Para 2030 se espera poder restaurar cerca de 34 millones de kilómetros cuadrados de bosques por todo el mundo. 

Para 2030 se espera poder restaurar cerca de 34 millones de kilómetros cuadrados de bosques

La iniciativa supone una inversión de más de 21.000 millones de euros. Entre los países que apoyan el pacto se encuentran Estados Unidos, Reino Unido, la Unión Europea, China, Rusia y países latinoamericanos como Colombia, Perú, Uruguay, Costa Rica, Honduras o Guatemala. 

También lo apoyan Brasil, Indonesia y la República Democrática del Congo con algunas limitaciones. Los países implicados en el pacto albergan el 85 por ciento de los bosques del mundo.

Este 2021, una de los principales acuerdos alcanzados es el de reducir la deforestación a nivel global.

2 – China y Estados Unidos compartirán tecnología para luchar contra la crisis climática

Los dos países que más contaminan del mundo han acordado compartir tecnología que permita reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. También hay un compromiso de reunirse gradualmente para formular acciones concretas en la lucha contra el cambio climático a lo largo de esta década.

No es la primera vez que los dos países colaboran en acuerdos climáticos. En 2014, un compromiso bilateral fue uno de los impulsos más importantes para llegar a los acuerdos firmados en París 2015.

Sin embargo, la cooperación entre ambas naciones se vio interrumpida cuando el expresidente estadounidense Donald Trump decidió abandonar el acuerdo de París. 

3 – Reducción drástica de las emisiones de metano

También, en la Cumbre del Clima (COP26) en Glasgow, más de 100 países se han comprometido a reducir un 30 por ciento las actuales emisiones de metano para el año 2030

Más de 100 países se comprometen a reducir las emisiones de metano un 30 por ciento para 2030

El metano es uno de los gases de efecto invernadero que más contribuye a aumentar la temperatura global. La tercera parte del aumento térmico lo produce este gas cuyas fuentes, entre otras muchas, incluye la ganadería, los cultivos pantanosos y la eliminación de residuos.

A pesar del elevado número de países comprometidos, otros como China, Rusia o India, que son grandes emisores de metano, no se sumaron a la iniciativa aunque lo podrían hacer en un futuro próximo.

Este 2021 se ha firmado un importante acuerdo para reducir las emisiones de metano a nivel global

4 – Importante inyección económica para potenciar las energías limpias

La inversión para generar energía limpia y reducir el uso de combustibles fósiles, es uno de los aspectos más positivos de este 2021. Cerca de 450 organizaciones financieras han acorado respaldar a aquellas empresas que se alejen de los combustibles fósiles y apuesten por la implantación de tecnologías limpias. 

Con ello se pretende sobre todo que las empresas privadas se involucren en una transición energética sin precedentes. De esta manera podrán alcanzar los compromisos de emisiones cero que se han puesto sobre la mesa. 

5- Mejora de la tecnología para detectar e investigar el cambio climático

A medida que el cambio climático antropogénico crece como problema para muchos gobiernos, también lo hacen las herramientas que lo vigila, investiga y predice. Cada vez disponemos de datos más extensos en tiempo y localización y además son mas precisos. 

Este 2021 se han desarrollado nuevas herramientas para entender mejor como la frenética actividad humana influye en el clima. Sin ir más lejos, Estados Unidos con su NASA y la Unión Europea a través del programa de observación Copernicus, han mejorado sus sistemas de teledetección. 

También se han introducido mejoras de cálculo en los modelos de predicción climática. A la vez, ha crecido la inversión en investigación relacionada con el cambio climático en muchos centros del mundo.  

Cada año mejora la tecnología que sirve para entender mejor el cambio climático de origen humano.

6- Progresiva reducción de las emisiones de carbón 


El uso de carbón a través de los combustibles fósiles, sigue siendo uno de los principales problemas a los que nos enfrentamos a la hora de frenar el cambio climático humano. 

Este 2021, más de 40 países entre los que se encuentran importantes consumidores de carbón como Chile, Polonia o Vietnam, han acordado reducir su uso. 

Aunque es positivo que un buen número de países se sumen al acuerdo, queda mucho por hacer en este apartado tan fundamental. Para empezar grandes consumidores de carbón como Estados Unidos, Australia, China o India no lo han firmado aún. Estos dos últimos si han acordado reducir su uso gradualmente durante los próximos años. 

7- El cambio climático sube puestos en las agendas políticas de muchos gobiernos

Este 2021 han sido numerosos los gobiernos que han elevado la importancia de la lucha contra el cambio climático en sus agendas políticas. Tanto el gobierno de Estados Unidos como el de China lo han puesto entre las tres prioridades políticas a nivel nacional, algo que nunca había ocurrido. 

La nota positiva de esta tendencia es que la crisis climática ya no solo copa las agendas de organizaciones ambientalistas, también la de gobiernos. El problema de nuestro maltrecho clima se está convirtiendo en un tema de interés económico global, aunque cada vez tiene más valor entre los consumidores. 

Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero está en la agenda de la mayoría de los gobiernos.

8 – La energía solar se convierte en la más barata del mercado energético

La aportación de las energías renovables al modelo energético global ha seguido aumentando este 2021. Hemos llegado ya a un punto en el que la energía solar es la fuente de energía más económica del mercado

Las baterías que almacenan esa energía o la eólica, la generada con el viento, son cada vez más accesibles y tienen mayor capacidad de almacenamiento. Esa mejora la hemos visto a lo largo de este año, aunque en los próximos, la tecnología debería mejor mucho más.  

A parte de estas dos importantes fuentes de energía limpia, también ha crecido este año la venta de automóviles eléctricos y las energías geotérmica y maremotriz. 

9 – Las comunidades indígenas ganan protagonismo protegiendo el medio ambiente

En la pasada Cumbre del Clima (COP26) hubo más presencia que en ninguna otra cumbre de las comunidades indígenas. Aunque solo representan cerca del 5 por ciento de la población global, se encargan de proteger más de tres terceras partes de los ecosistemas globales. 

El cambio climático es uno de varios problemas socio-ambientales que afecta a millones e habitantes del planeta. La creciente implicación y presencia de las comunidades indígenas, no solo ayuda a limitar de alguna manera la perdida de biodiversidad, también ayuda a implicar un importante sector de la población y a equilibrar las diferencias sociales. 

En 2021 la venta de vehículos eléctricos ha aumentado de forma considerable.

10 – Los humanos nos hemos implicado más que nunca a la hora de frenar la crisis climática

Aunque no hay una cifra exacta, la pandemia del Covid-19 nos ha hecho ver de otra manera el medio ambiente que nos rodea. Lo valoramos más, y cada vez somos más los que nos preocupamos por como estamos impactando sobre el. La forma de desplazarnos, cuanta electricidad usamos o que alimentos consumimos, nos preocupan cada vez más. 

Durante la primera mitad de 2021 las ventas de vehículos eléctricos han aumentado un 7.2 por ciento. Un dato superior al 4.3 por ciento de 2020.

La mayoría sabemos que nuestra manera actual de consumir bienes materiales no es nada buena para el clima del planeta. Sin embargo, cada año miramos más, aunque sea de reojo, al impacto que pueda tener nuestra manera de vivir. 

Reciclamos más, examinamos con detalle las etiquetas de lo que compramos, intentamos desplazarnos de manera más eficiente energéticamente hablando y hasta cambiamos nuestros hábitos alimentarios. Este 2021 somos todos más ecológicos que nunca, y esa revolución que lideran las nuevas generaciones solo seguirá creciendo.