¿Cómo afecta el tiempo en la intención de voto?

A pocos días de las elecciones generales os contamos como influye el tiempo a la hora de votar y os contamos la previsión que se espera para este 10N,

Mar Gómez

Mar Gómez

La meteorología nos influye en nuestra vida diaria. El tiempo nos afecta anímicamente, físicamente y a veces hasta emocionalmente, sobre todo si somos meteorosensibles. Determina nuestros planes, condiciona nuestras actividades deportivas y, entre las muchas actividades en las que el tiempo desempeña un papel fundamental, está también en la participación electoral que tenemos en las urnas y en la intención de voto.

Existen muchos estudios que demuestran una clara relación entre la participación y resultados electorales en función de si el día en que tenemos que ir a votar llueve o no.

El Washington Post publicaba que aproximadamente un tercio de votantes declaraban tener una probabilidad alta o  muy alta de no acudir a las urnas si llovía o nevaba el día de las elecciones.

De igual modo, el Corriere della sera, uno de los principales periódicos italianos, publicaba unos días antes de las elecciones italianas de 2013 que los votantes de mayor edad y los más indecisos serían los más afectados por las malas condiciones meteorológicas. La intención de voto también se ve afectada ya que apoyarían, en caso de acudir a las urnas, a partidos más tradicionales.

Brad Gómez, un profesor de la Universidad Estatal de Florida analizó la relación entre la participación electoral para elegir la presidencia de los Estados Unidos.

Comparó los datos de más de 20.000 estaciones meteorológicas y los resultados en las elecciones celebradas entre 1948 y 2000 mostrando que la lluvia reduce la participación de los votantes en un 1% y pudo afectar a las elecciones de 1960. En Australia, otro trabajo llegó a similares conclusiones.

En Inglaterra se cree que el sol favorece a quien está gobernando y, por eso, nunca se convocan elecciones en invierno. Alguien lo hizo en 1974 y perdió. Según otro estudio, hecho en Escocia, las horas de luz influyen a favor en la participación. 

Hasta aquí, muchas de estas conclusiones pueden resultar lógicas. Cuando llueve, en general nos da más pereza salir de casa, y si estamos indecisos con nuestro voto, quizás terminemos por no votar.

La participación electoral es aproximadamente medio punto porcentual menor en aquellos lugares donde llueve

En nuestro país, hay pocos estudios relacionados con el tema, pero destacamos el estudio de JA Caselles, de la Universidad Complutense de Madrid, que analiza la participación y elección de los votantes entre los dos partidos predominantes en ese momento, PP y PSOE en las elecciones municipales desde 1987 a 2011, demostrando que la meteorología adversa es un coste para el votante que se traduce en un menor nivel de participación.

En concreto, nos muestra que la participación electoral es aproximadamente medio punto porcentual menor en aquellos lugares donde llueve, respecto a aquellos en donde las nubes no descargan precipitación.

Además en su estudio revela que la meteorología no afecta por igual a todos los partidos, siendo los más conservadores los más beneficiados por la presencia de lluvia, ya que los votantes más conservadores se verían menos afectados por el aumento de los costes de ir a votar con condiciones adversas.