La borrasca Efraín nos trae el diluvio e inundaciones de récord que causan estragos
Extremadura ha sido la región más afectadas por las riadas y desbordamientos de ríos, alcanzando cifras récord de acumulado de lluvia en un día
Eltiempo.es IA
La borrasca Efraín prometía dejar una jornada este martes pasada de agua, en el día más intenso de lluvia de todo lo que llevamos de episodio. Y las previsiones no han defraudado en esta traca final de la lluvia. Efraín, situada en el Atlántico norte, ha traído consigo un diluvio que ha causado estragos en muchas comunidades, con inundaciones, riadas, desbordamientos de ríos, cortes en carreteras y otros daños materiales.
Las precipitaciones, empujadas por un río atmosférico que mantiene a España en «paso» de las borrascas, no han cesado en una jornada de lluvia que ya ha alcanzado récords en algunos puntos de España y que mantiene a 24 provincias con avisos activados este martes.
Extremadura, la región más afectada por las inundaciones
Probablemente haya sido Extremadura la región más afectada por los efectos de esta «borrasca con nombre». La actual estación de Cáceres ha registrado este martes un total de 50.4 milómetros (mm). Esto supone batir el récord de precipitación para un día de diciembre, que era de 46.4mm (25-12-1989).
Curiosamente, el pasado día 9 de diciembre se recogieron 50.2 mm, por lo que este mes se ha batido el récord dos veces. Si tomamos también los datos de la estación previa (desde 1920 hasta 1986), el récord estaría en 68.1 mm y aún no se habría batido».
Las abundantes lluvias de Extremadura han provocado el desbordamiento de numerosos ríos y arroyos. La situación más complicada se vive en el sur de Cáceres y norte de Badajoz, donde las precipitaciones superan los 80 mm, incluso los 100 mm puntualmente.
Esto ha provocado importantes crecidas, como la del río Salor, que a las 12:00 presentaba en Membrío (Cáceres) un caudal de 1.147m3/s, con un nivel de 8.17m. Para tomar una referencia, el Q100 (el caudal que se da cada 100 años) es de 1072m3/s».
Especialmente llamativos han sido los daños materiales generados por las lluvias en La Roca de la Sierra (Badajoz), donde el cauce del arroyo rivera de Troya se ha desbordado generando una fuerte riada llevándose todo a su paso.
Seguido de Extremadura, las otras dos regiones más afectadas por las precipitaciones, provocadas en parte por los vientos “llovedores” del suroeste, también llamados ábregos, han sido Andalucía, Castilla-La Mancha y Comunidad de Madrid.
Lluvia en Madrid: las zonas más afectadas por el diluvio
La Comunidad de Madrid, que ha activado el Plan de Emergencias, también ha sufrido las consecuencias de este martes de lluvia intensa, con severas inundaciones que han afectado especialmente a los municipios del sur, como Villaverde Alto, Móstoles o Fuenlabrada.
En algunas zonas de Madrid, que mantenía hoy los avisos amarillos activados por lluvia, se han llegado a registrar acumulados de 40 litros por metro cuadrado. Los avisos se desactivan en la jornada del miércoles, aunque seguirá la lluvia y la Comunidad mantendrá su plan por inclemencias meteorológicas activado.
Otras ciudades de Castilla La Mancha, Toledo, Guadalajara y Cuenca han acumulado los mayores registros de precipitación, donde se mantienen activados los avisos naranjas y amarillos.
Vientos «huracanados»
Además de la lluvia, las rachas de viento están siendo protagonistas durante estos días en varias zonas del país.
El viento sopló con especial fuerza durante la jornada del lunes. Las rachas más fuertes se dieron generalmente en alta montaña, con vientos de hasta 129km/horas en La Pinilla (Segovia) o La Covatilla (Salamanca) o Valdezcaray (La Rioja). Este martes siguen nuevos avisos por viento activos, y las rachas podrán superar los 70km/h en muchas zonas, especialmente del interior peninsular.
En la jornada del miércoles serán 16 provincias las que seguirán con avisos activados por lluvia y viento. Será el último día de lluvia intensa, antes de que el viernes remita ya casi por completo el episodio, con la estabilidad llegando a nuestro país.