Cinco alternativas originales para esquivar el plástico

Pablo Ramos

Pablo Ramos

Las alternativas al plástico son muchas pero existen algunos proyectos que, además de ser responsables con el medio ambiente, son de lo más innovadores

¿Crees que no existen alternativas al plástico que puedan ayudarte en tu día a día? Te ofrecemos una serie de ideas y proyectos que pretenden reducir los residuos plásticos en el medio ambiente de forma innovadora

La contaminación por plásticos es uno de los grandes desafíos de la sociedad actual. De hecho, se estima que más de 100 millones de toneladas métricas contaminarán el medio ambiente en solo 10 años, según el informe  “Solución a la Contaminación por Plásticos: Asumiendo Responsabilidades”, elaborado por la organización ecologista WWF.

Este documento también destaca que más de 500 especies de animales y peces han visto alterada su vida al quedar enredadas en los residuos plásticos o al ingerir este tipo de basuras.  

Un total de 100 millones de toneladas métricas contaminarán el medio ambiente en solo 10 años

Te ofrecemos cinco alternativas originales para esquivar el plástico en diferentes entornos y contextos. Desde burbujas comestibles para sustituir los envases de bebidas hasta el cultivo de microbios que se pueden alimentar de polímeros.

1 – Burbujas de agua para remplazar a las botellas

Las botellas de plástico y los tapones son unos de los residuos más frecuentes que se encuentran en las playas, los ríos, los océanos y las calles de las ciudades.  De hecho, se producen una media de más de 600.000 millones de botella de plástico cada año tal y como indican las estimaciones realizadas por Euromonitor International.

Para evitar los dañinos residuos que producen estos envases, un equipo de investigadores del Reino Unido ha diseñado una burbuja fabricada a base de algas y cloruro de calcio capaz de almacenar líquidos, resistente a los golpes y los impactos y totalmente comestible y biodegradable.

2 – Botellas que se desintegran solas

Según sus diseñadores, esta burbuja es una alternativa 100% natural a las botellas de plástico y se desintegra en el medio ambiente en unas seis semanas. Es más, ya están funcionando en algunos restaurantes como envases para salsas y como método de hidratación en eventos deportivos.

Otra de las opciones que se plantean como una de las mejores para sustituir las comunes botellas de plástico es la alternativa de fabricar estos envases con material biodegradable.

Parece una botella de agua común, pero lo cierto es que es una de las mejores alternativas para terminar con el plástico de las bebidas. Un estudiante islandés diseñó esta botella creada con algas que se desintegra solo unos 20 días después de vaciar su contenido.

3 – Papeleras marinas para recoger plástico

La contaminación por plásticos en mares y océanos se ha convertido a día de hoy en uno de los grandes problemas medioambientales ya que afecta tanto a plantas, peces, animales como incluso a la alimentación de los seres humanos. Debido a su impacto, existen varios proyectos que buscan eliminar estos residuos de diferentes modos.

Uno de los más llamativos es es la propuesta del proyecto Seabin Project, que busca limpiar el mar y los océanos de una gran variedad de sustancias y productos como plásticos, aceite o gasolina gracias a una “papelera marina” que filtra el agua que la rodea. Estos prototipos son capaces de recoger hasta cerca de dos kilos de residuos diarios.

4 – Barreras flotantes para capturar los residuos

La idea de poner unos sistemas de control que regulen y almacenen la basura que pueden existir en el océano no es nueva pero pocos se han atrevido a llevarla a la práctica. Sin embargo, el proyecto The Ocean Cleaup puso en marcha en 2018 la instalación de unas pantallas en el mar que gracias las corrientes marinas recogerían los residuos plásticos.

El prototipo organiza en forma de U una serie de barreras flotantes sujetas con anclas para ir almacenando las basuras.

Inicialmente, las pruebas funcionaron a la perfección pero al llevar el prototipo al océano no almacenaba la cantidad suficiente de basura y parte de eso residuos se escapaban de nuevo y volvían a flotar fuera de las barreras. Por ello, el proceso todavía se encuentra en fase de investigación y desarrollo para mejorar los fallos.

5 – Microplásticos por microperlas de celulosa

Los microplásticos que se añaden a productos como las cremas, los geles o las pastas de dientes u otros productos de higiene personal o de cosmética son de un tamaño tan diminuto que resulta imposible eliminarlos a través los sistemas de filtración de las aguas residuales y, por lo tanto, terminan en ríos y océanos, donde son ingeridos por aves, peces y otras especies marinas.

Sin embargo, para combatir este tipo de contaminación decenas de grupos de expertos están desarrollando diferentes estrategias que reduzcan el uso de estos microplásticos e incluso sustituirlo por otros materiales más sostenibles y biodegradables.

Así, varios grupos de investigación han creado diversos tipos de microperlas de celulosa, cuyo origen es totalmente vegetal, que pueden ser descompuestos por los organismos de forma natural y en un breve periodo de tiempo. Reduciendo con ello la contaminación.