¿Qué es el Green Friday?

El objetivo del Green Friday no es frenar las compras propias de estas fechas sino apelar a un consumo responsable y sostenible.

Pablo Ramos

Pablo Ramos

Desde hace ya unos años, el último viernes de noviembre se celebra el famoso Black Friday. Una campaña de descuentos en muchos productos que busca principalmente incrementar las ventas antes de las Navidades.

Sin embargo, las compras masivas centralizadas en este día suponen un considerable impacto para nuestro entorno.

Es es la otra cara del consumo masivo. Un creciente problema ambiental generado por el incremento de los residuos que se generan y la energía que se necesita para cubrir esa demanda masiva. Especialmente en un momento en el que el comercio online repunta más que nunca.

Qué es el green Friday

Para concienciar a la ciudadanía, y en contraposición al Black Friday, nació el concepto del Green Friday. Se trata de un movimiento que busca fomentar un consumo responsable y sostenible con nuestro entorno. Y ya son muchas las marcas que han decidido ir de la mano de este día.

De este modo, el objetivo del Green Friday es «llamar la atención de la sociedad sobre el derroche energético que supone el uso de la mayoría de electrodomésticos, además de sensibilizar sobre la importancia de reducir, reutilizar y reciclar», según apuntan desde la Comisión Europea.

Green Friday
Las compras masivas derivadas del comercio online durante el Black Friday suponen un gran coste medioambiental. Fuente imagen: pIxabay

Cuándo se celebra  

Al ser un movimiento y no un evento concreto, el Green Friday no tiene una fecha marcada en el calendario. Y es que este aboga por mantener un consumo responsable durante todo el año. No sólo durante la celebración del Black Friday.

No obstante hay que tener en cuenta que la máxima visibilidad y disfusión del Green Friday se produce el último viernes de noviembre.

Cómo nació el Green Friday

La alternativa «Green Friday» nació como una campaña que se oficializa en 2015. Con el esfuerzo de entidades como la Comisión Europea y las organizaciones ECODES, WWF y Ecoserveis. Su objetivo no es frenar las compras propias de estas fechas, sino apelar a un consumo responsable y sostenible.

De esta manera, la población «puede contribuir a la minimización de las más de 50 millones de toneladas de residuos electrónicos que se generan al año en el mundo».

Con el Green Friday también «se intenta hacer enfásis en la importancia de revisar pequeños detalles. Por ejemplo, el de observar la etiqueta energética de los productos que se adquieren. Al mismo tiempo, y en la medida de lo posible, se recuerda la importancia de utilizar los aparatos hasta el fin de su vida útil». Así lo apuntaban desde WWF en el año 2015. 

Cómo participar en el Green Friday

Desde la ciudadanía podemos realizar un sinfín de actividades que ayuden al consumo responsable y sostenible para minimizar el daño medioambiental en el planeta.

Por ejemplo, un primero paso es considerar comprar únicamente aquello que se necesita. E intentar no «caer» en consumo compulsivo, que se potencia con iniciativas como el Black Friday. 

Otro paso importante a la hora de comprar un producto puede ser el consumo energético que requieren para su funcionamiento. A la hora de comprar un electrodoméstico, por ejemplo, debería ser prioritario adquirir aquellos con una mayor eficiencia energética.

El objetivo de ello es ahorrar electricidad y dinero. Así salimos ganando todos: tanto el medio ambiente, como los consumidores.

También se puede intentar introducir en nuestro carrito de la compra productos fabricados de forma local. Los denominados «de kilómetro cero«, cuya huella de carbono es mucho menor que la de aquellos producidos en otros países.

Relacionado con lo anterior, es ideal evitar, en la medida de lo posible, los envoltorios plásticos o los productos de un sólo uso, que suelen estar fabricados también con este material.

Desde la organización de consumidores FACUA recuerdan que no hay que dejarse llevar por los descuentos del Black Friday. Y, si finalmente uno no puede resistirse, se debería analizar si el precio final es realmente razonable y si el producto resulta necesario.

Empresas comprometidas

Debido al incremento de la concienciación ambiental en la sociedad, cada año el Green Friday va ganando adeptos entre la ciudadanía. Pero también entre las propias empresas y marcas.

La sueca IKEA, por ejemplo, ha puesto en marcha (con motivo del Green Frida), el “viernes ecológico”. Lo consideran “la mejor oferta para el planeta y tu bolsillo para combatir el cambio climático».

Con esta acción la compañía sueca adquiere aquellos muebles de segunda mano de IKEA para que otras personas puedan usarlos.

Green Friday-carrito de la compra
Intentar introducir productos de cercanía en nuestro carrito de la compra es un primera paso que puede ayudar al medioambiente.
Fuente imagen: Pixabay

«Nosotros recompraremos tus antiguos muebles IKEA con la promesa de encontrar a alguien que les dará una segunda vida.  A cambio, recibirás crédito de IKEA que podrás gastar en algo que sí necesites», reza la campaña.

Por su parte, la marca de ropa sostenible ECOALF ha optado por otra opción aún más sostenible. No realizar ningún tipo de acción en estos días. «Como parte de la filosofía de ECOALF, la marca no participará en Black Friday. Por un planeta más allá de la próxima temporada», destacan en su web.