El otoño de 2022 fue muy cálido y seco en España

Hemos terminado el otoño de 2022, y continuando la tónica dominante del año, ha sido un otoño cálido y seco en casi todo el país

Roberto Granda

Roberto Granda

Hemos terminado el otoño, y toca hacer balance. Estamos en un año que está destacando por sus récords de temperatura, y venimos del verano más cálido registrado en España. Continuando con esta tónica, el otoño de 2022 ha sido también cálido y seco en la mayor parte del país.

El otoño de 2022, de muy cálido a extremadamente cálido

El otoño de 2022 ha estado marcado por el calor. El carácter en la mayoría de zonas ha sido muy cálido, con anomalías positivas marcadas. Hay zonas donde las anomalías han sido aún mayores, y podemos hablar de un otoño extremadamente cálido.

Tal y cómo se puede apreciar en el mapa, no hay ningún punto con anomalía negativa de temperatura. Las anomalías más bajas se localizan en las Islas Canarias. Destaca el dato de Gran Canaria – Aeropuerto, con apenas +0.4ºC sobre lo normal.

Si nos desplazamos a la península, el suroeste y Galicia son las regiones con las anomalías más pequeñas. Sevilla - Aeropuerto tiene +1.1ºC, con una temperatura media de 21.4ºC. Badajoz ha tenido una temperatura media de 19.4ºC, estando +1.4ºC sobre su media.

En gran parte del oeste y el norte, las anomalías han superado los +1.5ºC. Madrid - Retiro ha tenido una anomalía de +1.9ºC (media de 17.4ºC en 2022). La misma anomalía han tenido en Valladolid, con una media de 15.3ºC este año.

Ya por encima de los +2ºC se sitúa casi todo el este del país, así como algunas estaciones de la vertiente atlántica y cantábrica. Cuenca, a 900 metros de altitud, ha tenido una temperatura media de 16.4ºC, lo que implica +2.5ºC respecto a la media. La mayor anomalía ha estado en San Sebastián - Aeropuerto, con +3.1ºC (su media este 2022 ha sido de 19.2ºC).

Mucho calor de día y de noche

Las anomalías térmicas se han dejado notar tanto por el día como por la noche. Ninguna anomalía ha estado por debajo de 0ºC, y las más bajas en máximas y mínimas han rondado los +0.5ºC.

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Anomalías de temperaturas máximas y mínimas en otoño

Como se puede apreciar, en máximas gran parte de las anomalías más altas han estado en la mitad norte del país. Vitoria ha tenido +3.7ºC en máximas, aunque sus mínimas han compensado algo, apenas estando a +0.6ºC, la más baja del país.

Otros lugares como Teruel o Albacete han rondado los +3ºC, y por encima de los +2ºC en máximas se han quedado ciudades como Madrid o Alicante. En mínimas, las anomalías más elevadas se han dado en el Mediterráneo. Barcelona y Lleida lidera, con +2.8ºC y +2.9ºC respectivamente.

Aparte de muy cálido, el otoño ha sido seco en líneas generales

Ya hemos visto las temperaturas, ¿qué ha pasado con las lluvias? En líneas generales, el otoño además de cálido ha resultado entre seco y muy seco en amplias regiones del país.

Hay más variedad que en meses previos, ya que octubre y noviembre han resultado lluviosos en algunas áreas. Se puede apreciar cómo las mayores anomalías positivas se concentran en el noroeste peninsular. Vigo ha registrado casi 828mm, lo que supone una anomalía algo superior al +50%. La mayor anomalía de la península, no obstante, ha estado en Teruel. Registró 196.6mm, un +99.4% sobre lo normal.

Otros puntos donde ha llovido más de lo normal son San Sebastián - Aeropuerto, León, Ávila o Murcia. En las Islas Canarias destaca Gran Canaria, con +256.2% de anomalía. No obstante, se aprecia en el mapa cómo los marrones dominan: las anomalías negativas ocupan gran parte del territorio.

En este otoño de 2022, las anomalías negativas de lluvia han sido menos destacadas en la vertiente atlántica, gracias a algunos episodios húmedos. La excepción es Andalucía, que junto al este del país (especialmente Cataluña), han visto pocas lluvias. Málaga destaca, con una anomalía del -96.3%: apenas han caído 10.5mm.

¿Qué nos depara el invierno?

Hemos visto cómo este otoño ha sido, manteniendo la tónica del 2022, una estación muy cálida y seca. Las previsiones estacionales apuntan a un invierno más cálido de lo normal. De momento, lo que está claro es que diciembre ha empezado muy lluvioso, especialmente en la vertiente atlántica, donde hacía mucha falta.