El pantanal de Brasil, un reducto natural que lucha por sobrevivir

El mayor humedal del mundo encierra una belleza natural espectacular

David Escribano

David Escribano

En el corazón de Brasil se encuentra el lugar natural conocido con el nombre de “El Pantanal”. Se trata de la superficie pantanosa más grande del mundo. En total, el Pantanal de Brasil abarca más 180.000 metros cuadrados que se extienden por los estados de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul, además de tierras bolivianas y paraguayas.

En tan vasta superficie, la vida salvaje prolifera a una escala considerable, pero su estado virginal queda muy lejos del que tuvo décadas atrás.

El culpable del deterioro de este hábitat es, sobre todo, el ser humano. La presión poblacional en Brasil ha hecho que se intente aumentar las superficies de cultivo y explotar las riquezas naturales. Es algo que se está viendo en la selva amazónica, pero también en lugares como el Pantanal.

Cómo llegar al Pantanal de Brasil

qué ver en el Pantanal de Brasil
Fuente imagen: Pixabay

El Pantanal de Brasil posee dos puntos de acceso principales: Corumbá, al norte, y Campo Grande, al sur. Ambos están conectados por la carretera conocida con el nombre de la Transpantaneira, que en la estación lluviosa puede llegar a quedar anegada.

De estos dos lugares, Campo Grande es el que recibe mayor afluencia de turistas y está mejor preparado para hospedarlos y proporcionarles los medios para poder visitar el pantanal.

Cuál es la mejor época para visitar el Pantanal de Brasil

Las temperaturas son realmente elevadas durante todo el año en el Pantanal de Brasil. Por lo tanto, a la hora de elegir el mejor momento para visitarlo, se debe atender a las lluvias. Teniendo en cuenta este factor, la mejor época del año para visitar el Pantanal de Brasil es durante la estación seca. Es decir, entre los meses de julio y octubre.

En esa temporada es más fácil transitar por los caminos y se pueden realizar más actividades. Sin embargo, la espectacularidad y la vida que presenta el lugar en la época de lluvias a veces merece la pena el riesgo y el sacrificio.

Consulta el tiempo en el Pantanal si tienes pensado visitarlo próximamente.

Cuántos días se necesitan para conocer el Pantanal de Brasil

Caimán en el Pantanal de Brasil
Caimanes (en portugués, jacarés) en el Pantanal. Fuente imagen: Pixabay

Dada su amplia extensión, es prácticamente imposible llegar a conocer el Pantanal de Brasil en profundidad. Se necesitarían semanas para ello.

Una excursión habitual para llevarse una buena impresión de lo que es el Pantanal de Brasil suele durar tres noches y cuatro días. Eso sería lo mínimo, aunque es preferible alargarlo a una semana para tener una experiencia más intensa.

Las mejores cosas que hacer y ver en el Pantanal de Brasil

¿Y qué hacer durante esos días en el Pantanal de Brasil? Simplemente, debemos caer rendidos al poder de la naturaleza en su máximo esplendor.

Safaris de avistamientos de animales

Serpiente
Fuente imagen: Pixabay

Por supuesto, la principal actividad a realizar en el Pantanal de Brasil son los safaris de avistamiento de animales. Y es que en este lugar habitan más de 1.000 especies de aves, 400 tipos de peces, 300 especies de mamíferos y casi 500 tipos distintos de reptiles.

En un safari por tierra no es complicado admirar llamativos guacamayos, vigilantes caimanes, los insaciables osos hormigueros gigantes, o las graciosas capibaras, los roedores vivientes de mayor tamaño y mayor peso del mundo.

Los safaris nocturnos o a primera hora de la mañana ofrecen una experiencia aún más espectacular, pues la vida se multiplica, pero, sobre todo, porque es el mejor momento para tratar de encontrar a los elusivos jaguares.

El único representante del género Panthera en el continente americano ha hecho de este humedal su paraíso privado.

Es complicado verlo pero, cuando se logra, su belleza es totalmente inolvidable. No en vano, puede llegar a pesar 200 kg, el doble que el jaguar amazónico promedio. Esto le convierte en el tercer felino más grande del mundo, sólo superado por el tigre y el león.

Paseos en barca

Paseo en barca en el Pantanal de Brasil
Fuente imagen: © David Escribano

El medio acuático también ofrece un verdadero espectáculo en el Pantanal de Brasil. Las barcas suelen ser estrechas, con 4 o 5 pasajeros y bastante ligeras. Son ideales para maniobrar por el laberinto de manglares del pantanal.

Es así como se descubren multitud de caimanes, capibaras que se acercan al agua para refrescarse y beber, y decenas de coloridas aves. También se suelen pescar pirañas – desde la barca o desde la orilla -, esos peces tan temidos por culpa del cine.

En las zonas más empantanadas, no es complicado hallar anacondas. Sobre todo, no conviene darse un baño en estas aguas en ningún momento del año.

Paseos a caballo

Atardecer en el Pantanal de Brasil
Fuente imagen: Pixabay

Otra de las actividades más demandadas del pantanal es el paseo a caballo. Es una forma tranquila y placentera de adentrarse en los dominios de la naturaleza sin resultar demasiado invasivos.

Las agencias turísticas del Pantanal organizan cabalgatas de todo tipo de recorridos y duraciones, pero una de medio día de duración suele ser lo más habitual.

Tours de avistamiento de aves

Aves en el Pantanal de Brasil
Fuente imagen: © David Escribano

Los ornitólogos son de los que más disfrutan al visitar el Pantanal de Brasil. Y es que, este es un auténtico edén para ellos.

Entre las muchas especies de aves que pueblan estos humedales, destacan el jabirú, la cigüeña más grande del mundo y muy difícil de encontrar en otras partes del planeta; y el guacamayo azul púrpura, el segundo representante más grande de la familia de los loros, que destaca por su vistoso plumaje.

La vida en las haciendas

qué ver en el Pantanal de Brasil
Fuente imagen: © David Escribano

Por último, otra de las mejores cosas que hacer en el Pantanal de Brasil es vivir la experiencia de residir en una fazenda (hacienda).

Estas son las típicas granjas que poseen los habitantes del Pantanal. Muchas complementan su actividad agraria habitual con el alojamiento y la organización de excursiones para turistas. Es una buena manera de comprender la dureza de la vida en un entorno natural tan complicado.

Además, la existencia de este tipo de negocios ayuda a que la gente del pantanal se vea implicada en las tareas de conservación de este lugar único en el mundo.