Estos pueblos y barrios en España son ya un ejemplo de autoconsumo solar

El autoconsumo solar creció en España un 30% durante 2020. Os mostramos algunos innovadores ejemplos de autoconsumo solar por todo el país.

María José Montesinos

En los últimos meses estamos conociendo ejemplos de autoconsumo solar muy innovadores, que muestran que el camino hacia la sostenibilidad avanza

Las renovables crecen dentro del mapa energético. El año pasado, en Europa ya se consumió más energía procedente de fuentes limpias que de combustibles fósiles. El desarrollo tecnológico ha abaratado sus costes y, además, desde diversos ámbitos se están desarrollando proyectos que acercan las energías renovables al ciudadano. En España, crecen los proyectos en barrios, pueblos y ciudades que son innovadores ejemplos de autoconsumo solar.

Según la Unión Española Fotovoltaica, el autoconsumo solar creció en España un 30% durante 2020. Las instalaciones fotovoltaicas ya no son solo cosa de industrias o grandes polígonos. Cada son más los hogares que eligen aprovecharse de una fuente inagotable y limpia como es el sol. Desde hace unos meses estamos conociendo ejemplos de autoconsumo solar de generación compartida, que muestran que el camino hacia la sostenibilidad avanza.

Un pueblo de Soria, primera comunidad solar autosuficiente

Hace poco, un pequeño pueblo de Soria saltaba a los medios por convertirse en la primera comunidad solar autosuficiente de España. Castelfrio de la Sierra, de tan solo 27 habitantes, se convertía en pionera entre los ejemplos de autoconsumo solar, gracias a la instalación de 2 cubiertas solares fotovoltaicas en los tejados del centro social municipal y el lavadero, que funciona también como elevadora de aguas. En total, 15kW/h, que han supuesto un ahorro del 65% en la factura eléctrica del Ayuntamiento.

Castelfrio de la Sierra, en Soria, ejemplo de autoconsumo solar en las localidades rurales. Fuente: Megara Energía

El proyecto es una iniciativa de la cooperativa Megara Energía, REE y la Caja Rural de Soria, que han creado para ello la sociedad Hacendera Social. A través de ella, Castelfrio no solo generará su propia electricidad, sino que la gestionará de manera autónoma. El centro social y el lavadero son los primeros pasos en este ejemplo de autoconsumo solar. “Tenemos previsto instalar un cargador para vehículo eléctrico, añadir el alumbrado público a la red de autoconsumo solar mediante baterías y monitorizar todo el sistema a través de fibra óptica”, explica Fernando Rubio, gerente de Megara Energía.

Objetivo: que el autoconsumo solar llegue a todos los habitantes

Pero, sobre todo, Rubio piensa “en los vecinos, que tendrán la oportunidad de sumarse a esta red local libremente”. Por un lado, podrán colocar placas solares en sus tejados, con lo que se convertirían en productores y consumidores, con la posibilidad de verter sus excedentes a la red eléctrica. Pero también será posible participar “simplemente como consumidores, si no disponen de cubierta en su vivienda o mira al norte”, señala Rubio. El objetivo es que el autoconsumo solar pueda llegar a todos los habitantes.

Granjas y explotaciones ganaderas disponen de grandes cubiertas donde instalar paneles solares

A 20 kilómetros de la ciudad de Soria, Castelfrio de la Sierra vive fundamentalmente de la agricultura y la ganadería. Desde Megara creen que también deberían instalarse placas fotovoltaicas en las cubiertas de las explotaciones ganaderas y las de un pequeño polígono cercano. Estos tejados solares podrían servir tanto para la actividad de las granjas como para el pueblo. “Producimos sin generar huella de carbono y además, al ser energía de Km 0, que se consume donde se genera, incrementamos su eficiencia», afirma Rubio. «Se consigue un ahorro económico, y además, logramos que la comunidad aproveche sus propios recursos locales”, añade.   

El autoconsumo solar, un aliciente para vivir en los pueblos y luchar contra la despoblación rural

El ejemplo de autoconsumo solar de Castefrío es un proyecto piloto para “toda la Mancomunidad de las Tierras Altas a la que pertenece este municipio, junto a otros 15 núcleos de población”, dice Rubio. “Este piloto se puede escalar a cualquier población, y queremos que el autoconsumo solar sea un aliciente más para vivir en los pueblos y luchar contra la despoblación rural”, señala. “En España hay 2.000 Castelfrios”, concluye el gerente de esta cooperativa que desarrolla proyectos por todo el país.

Un barrio solar pionero en Zaragoza

En Zaragoza, 200 familias y comerciantes del barrio del Actur van a recibir energía de las placas fotovoltaicas instaladas en dos polideportivos municipales. Forman parte del proyecto Barrio Solar, un plan pionero en España que se está llevando a cabo en la capital aragonesa. Este ejemplo de autoconsumo solar cuenta con la participación del Ayuntamiento, que cede las cubiertas de los edificios municipales, la fundación Ecodes, que desarrolla la gestión, y la compañía energética EDP, que se ocupa de la instalación.

Viviendas y comercios participantes se encuentran situados a menos de 500 metros de estos pabellones deportivos, en cuyos tejados se han instalado 300 paneles solares. Como en el caso de Soria, este modelo acerca la generación de energía al punto de consumo, haciendo que su uso sea más eficiente, ya que al realizar un recorrido corto, evita la pérdida de electricidad que se produce mientras viaja por la red. Los 300 paneles de autoconsumo solar generarán 150.000 kilovatios/hora anuales, con los que se evitará lanzar a la atmósfera 40.000 kilos de CO2 al año. Esa reducción de carbono es la que se produciría al plantar 3.000 nuevos árboles, según datos del Ayuntamiento zaragozano.

El Barrio Solar evitará 40.000 kilos de emisiones de CO2. El equivalente a plantar 3.000 nuevos árboles

Los participantes del proyecto se benefician del autoconsumo de energía solar sin necesidad de realizar ninguna obra o instalación en su vivienda, o cambiar de compañía. El ahorro medio estimado por vivienda es de un 30% del consumo de electricidad.

“El autoconsumo solar colectivo facilita la participación de los ciudadanos porque puede darse el caso de que no consigas poner de acuerdo a tu comunidad de vecinos, que vivas de alquiler o que tu edificio no reúna condiciones para la instalación de placas solares”, explican desde Ecodes. Este ejemplo de autoconsumo solar libra además a sus participantes de tener que realizar ningún trámite personal.

El tejado de un colegio de Madrid, ejemplo de autoconsumo solar

Si en Zaragoza han usado las cubiertas de dos polideportivos, en Madrid encontramos una escuela. El colegio San Viator, en Usera, se ha convertido en el núcleo desde el que se genera energía 100% renovable a una comunidad de usuarios que se encuentren en un radio de 500 metros de diámetro, y que forman parte de este nuevo ejemplo de autoconsumo solar.

La cubierta del colegio San Viator, en Madrid, donde se han instalado 117 paneles solares. Fuente: Repsol Solmatch

El colegio buscaba producir su propia energía para ser sostenible y no contaminar, y encontró que podía, además, facilitar a sus vecinos la oportunidad de consumir energías limpias y obtener un rendimiento de los watios producidos en su tejado. Los 117 paneles solares del San Viator suponen una potencia instalada total de 40 kW. Es una capacidad suficiente para dar servicio hasta 105 hogares. Un ejemplo de autoconsumo solar que cada año contribuirá a reducir más de 23.800 kg de CO2.

Más de 100 proyectos de autoconsumo solar

Las instalaciones del San Viator forman parte del proyecto Repsol Solmatch, que cuenta actualmente con más de 100 ejemplos de autoconsumo solar como este repartidos por toda España. En total, unas 9.100 viviendas que pueden ellas reducir un 20% su factura, según estimaciones de la compañía. Como el resto de los ejemplos, al no abandonar la red eléctrica general, los hogares nunca se quedan sin suministro.

Con las comunidades solares, los ciudadanos pueden disfrutar de energías renovables sin necesidad de tener instalaciones propias

Ejemplos de autoconsumo solar compartido como estos ponen en manos del ciudadano la posibilidad de apuntarse a las energías renovables sin necesidad de tener instalaciones propias. Las cubiertas de escuelas, centros municipales, polideportivos, o comunidades de vecinos, pero también naves industriales o centros comerciales pueden convertirse en comunidades solares de generación eléctrica distribuida, facilitando a la población de alrededor energías limpias y de consumo local. Un tanto para el planeta y para nuestro bolsillo.