¿Por qué aumenta el estreñimiento en verano?

El verano provoca cambio en los hábitos de vida que influyen en nuestro ritmo intestinal pudiendo favorecer el estreñimiento.

Pedro Soriano

Pedro Soriano

Con la llegada de las vacaciones de verano, también se producen cambios corporales importantes en nuestra vida diaria. El verano es sinónimo de cambio de hábitos saludables y por lo tanto, cambio en el ritmo intestinal. Por ello es bastaten frecuente que las personas sufran de estreñimiento en verano.

Las salidas con amigos, los días en la playa o piscinas, las fiestas nocturnas y los nuevos horarios fuera de tu rutina, pueden cambiar el ritmo de nuestros intestinos sin previo aviso, provocando este problema, que puede resultar muy incómodo.

¿Qué es el estreñimiento?

El estreñimiento es una condición común que no se considera una enfermedad sino un síntoma. Y, a menudo, es debilitante con una variedad de síntomas y etiologías.

Se define como movimientos intestinales poco frecuentes asociados con heces duras. Esto se debe a la retención de exceso de líquido en el colon, seguido del endurecimiento de las heces.

También hablamos de estreñimiento cuando incluye vaciado disfuncional, que es la sensación de vaciamiento incompleto del intestino.

Tomar fruta ayuda a disminuir el estreñimiento ocasional. Fuente imagen: Pixabay

Estreñimiento en verano: ¿Qué puede causarlo?

El estreñimiento puede ser causado y/o empeorado por una serie de factores, que pueden incluir; movilidad limitada, ciertas condiciones médicas, dieta, cambios en la rutina y el estilo de vida, y medicamentos. En verano, el estreñimiento se produce principalmente por:

– Aumento de la temperatura y pasar más horas al sol sin hidratarse provoca deshidratación.
– Cambios en la rutina diaria de alimentación, ejercicio y sueño.
– Alteración de la rutina en tus visitas al baño.
– Variación en la dieta.
– Disminución de actividad física. 

¿Qué podemos hacer para evitar el estreñimiento?

El objetivo del tratamiento del estreñimiento es aliviar los síntomas, restaurar los hábitos intestinales normales y mejorar la calidad de vida. Los cambios en la dieta y el estilo de vida son las primeras opciones. Las dietas bajas en fibra, frutas y verduras aumentan el riesgo de estreñimiento.

En verano, busca fruta fresca, que es siempre más apetecible. Esto facilita que se puedan ingerir dos piezas de fruta al día. Los kiwis y las ciruelas son las más apropiadas, por sus propiedades laxantes. Por el contrario, debes evitar los plátanos y las manzanas, ya que son bastante astringentes.

Consumir fibra

La fibra es el primer aspecto a tener en cuenta ya que puede ser un factor contribuyente. Se recomienda utilizar fibra en la dieta con el objetivo de obtener unos 25 gramos de fibra al día.

Si alguien tiene una condición médica, como el síndrome del intestino irritable, es importante consultar a un especialista para evaluar la ingesta de fibra, ya que puede empeorar los síntomas.

Practicar deporte (con precaución)

Durante las vacaciones de verano, establece un horario para acudir al servicio de la manera más regular posible. Además de mantener un horario para acudir al servicio, la actividad física es fundamental para mejorar el tránsito gastrointestinal.

Un paseo por la playa puede ser una buena opción a la hora de practicar deporte en verano. Fuente imagen: Pixabay

No debemos impedir una evacuación intestinal porque puede empeorar los síntomas.

Reducir el estrés

Aunque pueda parecer contradictorio, el estrés puede aparecer durante las vacaciones por motivos familiares, contratiempos o incluso una agenda muy apretada. Evitar el estrés son estrategias importantes para tratar ya que se alteran los movimientos peristálticos del intestino como consecuencia de una reducción del aporte sanguíneo al tracto intestinal.

El estrés puede provocar un enlentecimiento del movimiento intestinal y, por lo tanto, favorecer la aparición de estreñimiento.

Mantenerse hidratado

En verano, el calor puede impedir que nuestro cuerpo esté lo suficientemente hidratado, por lo que no debemos olvidarnos de beber de 1,5 a 2 litros de agua al día.

Hay que tener en cuenta que la pérdida de líquidos por calor y sudor también es mayor, lo que afecta directamente al aparato digestivo.

estreñimiento en verano
Mantenerse hidratado es fundamental para evitar el estreñimiento en verano. Fuente imagen: Pixabay

Por lo tanto, debemos aumentar nuestra ingesta de líquidos, frutas y verduras frescas para controlar eficazmente el estreñimiento. Las heces se endurecen y se vuelven secas cuando el colon (intestino grueso) absorbe (toma) demasiada agua.

Mantenernos hidratados es fundamental para evitar el estreñimiento. El agua cumple una función fundamental en la formación de las heces y facilita su expulsión.

Posibles complicaciones del estreñimiento

El estreñimiento puede provocar complicaciones más graves, como hemorroides, fisuras anales o diverticulitis (cambios e inflamación en la pared intestinal).

Aunque el tratamiento para el estreñimiento generalmente se enfoca en cambios en la dieta, a veces se pueden necesitar medicamentos si los cambios en el estilo de vida no tienen éxito.

Conociendo y teniendo en cuenta estos consejos de salud, podrás prevenir y solucionar tu problema de estreñimiento veraniego y sus posibles complicaciones. No dudes acudir a tu centro de salud si la situación persiste o si presentan síntomas como náuseas o dolor abdominal que no cesa.

Estudios/fuentes

  • Gardiner, A., & Hilton, A. (2014). The management of constipation in adults. Nurse Prescribing, 12(3), 128-134.
  • Gardiner, A., & Hilton, A. (2016). Managing constipation in adults with co-morbidities. Independent Nurse, 2016(10), 21-25.
  • Guía para prevenir y tratar el estreñimiento. Fundación española del aparato digestivo.