Fallece Yoyo, la elefanta más longeva del mundo y emblema del Zoo de Barcelona

El Zoo de Barcelona despide a Yoyo, la elefanta más longeva del mundo. Su historia es un símbolo de superación y cuidado animal.

Redacción

El Zoo de Barcelona está de luto tras la pérdida de Yoyo, la elefanta africana que, con 54 años, ostentaba el récord de longevidad para su especie en todo el mundo.

Su fallecimiento, comunicado el pasado sábado, marca el final de una vida llena de retos, superación y resiliencia, convirtiéndola en una figura entrañable tanto para los visitantes como para el personal del zoológico.

La vida de Yoyo, marcada por la adversidad y la recuperación

Yoyo llegó al Zoo de Barcelona en 2009 tras una intervención realizada en el antiguo complejo RioLeón Safari, donde había sido trasladada desde un circo.

Durante su vida anterior, sufrió lesiones físicas y traumas psicológicos que dejaron secuelas significativas. Su llegada al zoológico fue parte de un programa de conservación internacional liderado por el Gobierno central y en colaboración con el Ministerio de Transición Ecológica, bajo el marco del Convenio CITES.

En el Zoo, Yoyo recibió atención especializada de veterinarios y cuidadores que trabajaron incansablemente para mejorar su calidad de vida. Con el tiempo, mostró una notable recuperación, tanto en su estado físico como emocional.

Además, se integró con éxito a un grupo de elefantas, formando un vínculo especial con Susi y Bully, sus compañeras inseparables.

Instalaciones adaptadas a sus necesidades

En 2013, el Zoo de Barcelona trasladó a las elefantas a un espacio diseñado para replicar las condiciones de la sabana del Sahel. Este entorno cuenta con comedores elevados a ocho metros de altura, lodazales, ramas y sustratos naturales, ofreciendo a los elefantes oportunidades para realizar comportamientos propios de su especie. Las instalaciones también están climatizadas y permiten el acceso libre a la luz natural.

Según Antoni Alarcón, director del zoológico, Yoyo era más que un animal: “Era un ser entrañable, con un carácter único, cuidadora y referente para sus compañeras.

Siempre la recordaremos con afecto”. La primera teniente de alcalde de Barcelona y presidenta de la entidad que gestiona el Zoo, Laia Bonet, también destacó el compromiso del centro en el cuidado y bienestar de animales de edad avanzada y en la conservación de especies amenazadas.

Un final inevitable para Yoyo

La salud de Yoyo había empeorado en las últimas semanas debido a su avanzada edad. A pesar de los esfuerzos del equipo veterinario por mantener su calidad de vida, el paso del tiempo finalmente cobró su precio.

Tras su fallecimiento, se activó un protocolo en colaboración con la Universidad Autónoma de Barcelona y la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA) para compartir información relevante sobre su caso, contribuyendo al conocimiento y cuidado de otros elefantes en situación similar. Ahora, la atención del personal del zoológico se centra en Susi y Bully, quienes también sentirán la ausencia de su compañera.

Un legado perdurable

El Zoo de Barcelona ha anunciado un homenaje para celebrar la vida de Yoyo, cuyo impacto va más allá de las fronteras del parque. Su historia simboliza la lucha y la esperanza en la conservación de especies amenazadas, y su recuerdo permanecerá vivo en los corazones de quienes tuvieron la oportunidad de conocerla.

Yoyo
Elefantes africanos en su hábitat natural. Fuente: Banco de imágenes Canva