Indignación en Australia por la captura de una cría de wombat por una influencer
La captura de una cría de wombat por una influencer en Australia ha generado un rechazo generalizado y abre el debate sobre la conservación de la fauna.
Redacción
El vídeo de una influencer estadounidense capturando una cría de wombat en plena noche ha desatado una ola de indignación en Australia, donde la fauna autóctona está protegida por estrictas normativas medioambientales.
Las imágenes, difundidas en redes sociales, han generado un intenso debate sobre el respeto a la vida silvestre y han llevado a las autoridades a evaluar medidas legales contra la protagonista del incidente.
Caso Wombat: una acción irresponsable con repercusiones legales
El episodio ocurrió en una zona rural no identificada de Australia, cuando la influencer, que se presenta como «bióloga de vida silvestre y científica ambiental», fue grabada sujetando a la cría de wombat mientras corría hacia la cámara.
En el vídeo, el marsupial se retorcía e intentaba liberarse, mientras su madre observaba la escena a distancia. Poco después, la joven dejó al animal en el suelo y publicó las imágenes en su cuenta de Instagram.
La reacción no se hizo esperar. Usuarios de redes sociales, defensores del medioambiente y especialistas en fauna silvestre condenaron el acto, señalando que interferir con animales salvajes de esta manera es una violación de las leyes de conservación de Australia.
En los últimos años, los wombats han enfrentado problemas de salud debido a la propagación de la sarna, lo que agrava aún más la necesidad de preservar su hábitat y reducir el contacto humano.
Reacciones en redes y postura del Gobierno australiano
El vídeo se volvió viral, generando un aluvión de críticas. La influencer, ante la presión, optó por hacer privada su cuenta en Instagram y eliminar el contenido. Sin embargo, el impacto ya estaba hecho. Distintos sectores de la sociedad australiana han solicitado sanciones ejemplares para evitar que incidentes similares se repitan.
Las autoridades han iniciado una revisión del visado de la joven para determinar si ha incumplido las normativas locales sobre protección de la fauna. En Australia, la captura o daño a especies nativas sin autorización puede conllevar multas que superan los 170.000 euros.
