La ciudad de España que plantea cobrar una tasa a los turistas como Venecia

Sitges, que recibe más de 3 millones de turistas al año, valora positivamente el «impuesto veneciano» para evitar masificaciones

Redacción

Sitges, una de las ciudades de Cataluña que más turismo recibe, ha mostrado interés por el impuesto que cobra Venecia desde el pasado mes de abril a los turistas por acceder al casco antiguo de la ciudad. El objetivo de esta tasa es fundamentalmente evitar la masificación que sufre la ciudad italiana y gestionar los flujos turísticos.

En este mismo sentido, Sitges, con 32.000 habitantes censados y que recibe alrededor de tres millones de turistas al año, ha valorado positivamente este tipo de tasas para fomentar un turismo sostenible en esta ciudad costera de la Costa Dorada.

Venecia cobra 5 euros por el acceso de un día a su casco histórico (y sin permanencia hotelera). Sin embargo, según medios locales, este impuesto turístico no ha disminuido los flujos durante las primeras semanas de vigencias. Los datos del Ayuntamiento de Venecia indican que entre 15.000 y 22.000 personas han pagado el impuesto desde su implementación el 25 de abril.

Más de 3 millones de turistas al año en Sitges

Sitges cuenta con 32.000 habitantes censados, pero anualmente recibe alrededor de tres millones de turistas. Este desequilibrio ha llevado a la ciudad a reflexionar sobre la insuficiencia de la recaudación de impuestos de los residentes para sufragar y mantener servicios locales esenciales, como la recogida de residuos.

Adicionalmente, Sitges se ha consolidado como uno de los destinos turísticos más importantes de Cataluña debido a su atractiva oferta cultural, sus playas y su vibrante vida nocturna.

La ciudad alberga eventos internacionales, como el Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña, y cuenta con una amplia gama de museos, galerías de arte y arquitectura modernista.

Sin embargo, el creciente número de visitantes plantea un desafío significativo, ya que la masificación del turismo amenaza con afectar la calidad de vida de los residentes y el entorno urbano.