La sequía del siglo XXI será cada vez más generalizada

A medida que el planeta se calienta la sequía se acentúa en muchas regiones. Si llegamos a la barrera de 2ºC de calentamiento una cuarta parte del planeta vivirá condiciones áridas.

Mario Picazo

Mario Picazo

Aunque algunas veces saque a la luz tesoros escondidos de la antigüedad, la sequía se encuentra entre los riesgos naturales más impactantes que vivimos hoy en día. Con frecuencia causa graves pérdidas en el sector de la agricultura, en los ecosistemas y afecta directamente a la población humana.

La comunidad científica lleva tiempo advirtiendo que la llamada aridificación del planeta va a seguir empeorando con el paso de los años. A medida que la escasez de precipitación crece y los periodos de sequía se vuelven más intensos y devastadores la tierra se seca.  

Un reciente estudio realizado por científicos de varios centros de investigación del mundo muestra un dato muy alarmante. Y es que cerca de una cuarta parte de nuestro planeta podría vivir en un estado de sequía permanente. Ese escenario se alcanzaría si el calentamiento global llega a los 2ºC para el año 2050.

Cerca de una cuarta parte del planeta, podría vivir en un estado de sequía permanente si el calentamiento global llega a 2ºC.

Los registros históricos de índices de precipitación, caudal y sequía derivados de la observación muestran un aumento de la aridez. Esta viene dándose desde la década de 1950 en varias regiones del planeta. Entre ellas, destacan:

– Gran parte de África.

– El sur de Europa: en España, por ejemplo, las sequías han provocado algunos años cortes de suministros de agua en algunas regiones.

El este de Asia

El este de Australia.

El noroeste de Canadá.

El sur de Brasil.

Sequía
La sequía seguirá aumentando en muchas regiones del planeta si mantenemos el calentamiento global a raya por debajo de 1.5 grados.

¿En qué se basa esta afirmación?

Para predecir la tendencia de las sequías del futuro, los investigadores se han basado en las últimas proyecciones de los modelos numéricos CMIP6, que incluye más de 100 modelos de más de 50 centros de cálculo. Los datos obtenidos se basan en escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero moderadas a altas, y confirman la tendencia hacia una sequía generalizada. 

También muestran un aumento de la sequía agrícola de hasta un 200% en la mayor parte de América, Europa y la región del Mediterráneo, el sur de África, el sudeste de Asia y Australia.

Por si fuera poco, los resultados también confirman que la sequía prevista para las próximas décadas durará más. No sólo eso, sino que se extenderá a más regiones durante la recta final del siglo XXI, concretamente entre 2070 y 2099.

Sequía
Una de los sectores más afectaos por esta tendencia de un clima cada vez mas árido en muchas regiones del planeta es la agricultura.

Más lluvias en las áreas tropicales por la sequía

El planeta ya se ha calentado mas de 1ºC desde periodos preindustriales. Aunque algunas zonas están experimentando un aumento de las precipitaciones, muchas otras van a experimentar lo contrario. Esto sucederá si el calentamiento global no se consigue limitar a 1.5ºC. Es de vital importancia para el ser humano que esto no suceda.

Los expertos ya han insistido en esto en numerosas ocasiones. Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para mantener el calentamiento global a raya en torno o por debajo de 1.5ºC sería una manera de evitar que crezca la aridificación en muchas zonas del mundo.

A medida que aumentan las temperaturas, aumenta la demanda de vapor de agua de la atmósfera y eso hace que las precipitaciones disminuyan en muchas regiones, sobre todo subtropicales. Ese es quizá el principal impulsor de la sequía que se extiende imparable y se seguirá extendiendo e intensificando durante las próximas décadas.

Una atmósfera más cálida y deformada, como la que estamos gestando y que se ha encogido 400 metros desde 1980, hará que, en general, la precipitación a nivel global se concentre en los trópicos. Pero, el aumento de la precipitación en las regiones tropicales sucederá a costa de que las regiones más secas del planeta aún más áridas.