Los humedales de España necesitan ayuda urgente
Los humedales de España se deterioran a un ritmo alarmante y urge adoptar un modelo de gestión tanto del agua como de protección del entorno diferente al actual.
Mario Picazo
España cuenta con un patrimonio húmedo estimado en más de 2.000 humedales, la mayoría ubicados tierra adentro. Muchas de estas zonas, que permanecen en condiciones de inundación o con el suelo saturado de agua durante largos periodos, albergan un ecosistema híbrido donde conviven especies acuáticas y terrestres únicas.
Desde el año 1900, la humanidad ha destruido el 64 por ciento de los humedales del mundo. Pero el 2 febrero, de 1971 se firmó el Convención de Ramsar. El motivo, la conservación y el uso racional de los humedales mediante acciones locales, regionales y nacionales con apoyo de la cooperación internacional.
Por eso cada 2 febrero se celebra el Día Mundial de los Humedales. El principal objetivo se estableció hace ya 50 años, y es el de recordar la importancia que tiene la preservación de nuestros humedales.
Desde el año 1900 la humanidad ha destruido el 64 por ciento de los humedales del mundo
En España un total de 75 humedales que cubren más de 300.000 hectáreas de superficie representan un entorno de valor incalculable y forman parte del Convenio Ramsar. Somos, de hecho, el tercer país con mayor número de humedales protegidos.
Sin embargo, los humedales de España están fuertemente amenazados. Y, lo más preocupante, esta amenaza afecta a dos de nuestros humedales más importantes, situados en la mitad sur de nuestro país, Doñana (Andalucía) y las Tablas de Daimiel (Castilla-La Mancha).
VÍDEO: LA HUELLA DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN LOS HUMEDALES DE ESPAÑA
El deterioro de los humedales españoles sigue aumentando a un ritmo alarmante
Hoy, 170 países del mundo supuestamente volcados en preservar una lista de 2.414 humedales, que abarcan 252,54 millones de hectáreas celebran el 50 aniversario del Convenio Ramsar.
España forma parte de este convenio, aunque las organizaciones ecologistas denuncian que, a pesar del compromiso plasmado sobre papel, en la práctica, no se está llevando a cabo la conservación inicialmente pactada.
Para organizaciones como Ecologistas en Acción, la gestión del agua que realizan las diferentes administraciones no está siendo la adecuada para esa preservación.
Sin ir más lejos, ponen como ejemplo el de los Parques Nacionales. En España tenemos 15, pero en ellos priman los beneficios económicos derivados del turismo, sobre la preservación de los humedales.
Un caso que denuncia la organización ecologista, en el que parece camuflarse la realidad de la situación de nuestros humedales, es la de las marismas del río Guadalquivir.
En esta zona se han perdido 150.000 hectáreas originales, y más al norte, las lagunas fluviales manchegas han menguado casi por completo.
La elevada factura para la recuperación de nuestros ya deteriorados humedales
La gestión del agua por parte de las diferentes administraciones públicas, deja mucho que desear, según denuncia la organización SEO/BirdLife. Recuperar todos los entornos degradados para evitar su colapso definitivo, tiene un coste muy elevado que rondaría al menos los 1.700 millones de euros.
Entre las mayores inversiones de recuperación se encuentran la recuperación del Mar Menor que costaría la friolera de 620 millones, la del Delta del Ebro cifrada en 570 millones, y la de Doñana que costaría entorno a 500 millones.
Las principales causas de la pérdida y degradación de los humedales son, los grandes cambios en el uso del suelo y particularmente el aumento de la agricultura y el pastoreo. La desviación de agua mediante represas, diques y canalizaciones tanto supone un estrés hídrico importante para nuestras zonas húmedas.
Un modelo de gestión del agua acorde con las necesidades de nuestros humedales
En España la mitad de los ríos, humedales y acuíferos se encuentran en mal estado. Los datos que aporta la organización ecologista son alarmantes. El 91 por ciento del hábitat de lagunas costeras está en peligro de desaparición, el 100 por cien de las especies de peces de agua dulce están en mal estado de conservación, y el 71 por ciento de anfibios también.
En España el 91 por ciento del habitat de lagunas costeras está en peligro de desaparición
Según SEO/BirdLife, la fórmula más sensata para conseguir recuperar esas zonas dañadas, pasa por aplicar un modelo de gestión que cumpla con la Directiva Marco del Agua. También supone un cambio de modelo de políticas sectoriales acorde con el estado de los ecosistemas acuáticos.
La importancia de la preservación de los humedales en España y el mundo
Para muchos, los humedales son zonas simplemente inundadas, no urbanizables, donde anidan mosquitos y otros muchos insectos y que tienen escaso valor. Todo lo contrario, hay muchas razones por las que los humedales tienen un valor incalculable y los necesitamos en el mejor estado posible. Estos son solo algunos de los beneficios de los humedales:
– Los humedales proporcionan agua dulce.
– Los humedales de agua dulce facilitan el agua para nuestras necesidades básicas (beber, cocinar y asearnos) y para el riego.
– Los humedales alimentan a la humanidad.
– El arroz, cultivado en arrozales que constituyen humedales, es el alimento básico de casi 3.000 millones de personas y representa el 20 % de la alimentación del mundo.
– Los humedales son los amortiguadores de la naturaleza.
– Los humedales en las cuencas fluviales actúan como esponjas naturales, absorbiendo las precipitaciones y reduciendo el impacto de las inundaciones. La misma capacidad de almacenamiento constituye una salvaguardia contra la sequía. Los manglares y los arrecifes de coral reducen la velocidad y la altura de las mareas de tempestad y el impacto de los maremotos y huracanes.
– Los humedales son esenciales para la biodiversidad.
– Los humedales albergan más de 100.000 especies de agua dulce conocidas, esta cifra aumenta continuamente. También son esenciales para muchos anfibios y para la reproducción y la migración de las aves.
– Los humedales proporcionan productos y medios de vida sostenibles.
– Más de 660 millones de personas dependen de la pesca o la acuicultura para su sustento.
– Los humedales también facilitan madera para la construcción, aceite vegetal, plantas medicinales, materia prima para elaborar tejidos y forraje para los animales.