Pablo Ramos
El mes de agosto ha cerrado con 50 fallecidos por ahogamientos en las playas, ríos, embalses y piscinas y otros espacios acuáticos en España. Así lo muestra la última actualización del Sistema Integrado de Gestión de Datos e Incidencias en el Medio Acuático (SIFA).
En total, el verano cierra con 130 muertos por ahogamiento durante los meses de julio y agosto. En cambio, son 307 personas ahogadas en lo que va de año 2023, según los datos de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo.

¿Dónde se ahoga la gente?
El espacio acuático que más ahogados ha registrado en España a fecha de 5 de septiembre es la playa donde han fallecido 168 personas. Después, las piscinas con 41 fallecidos, los ríos con 37 y los embalses con 12 son las áreas con más siniestros registrados.
Por comunidades, las comunidades autónomas que más fallecidos por ahogamiento han registrado en 2023 son las regiones del litoral. Cataluña es la región con mayor número de incidentes, con 49. Le siguen Andalucía con 43, Comunidad Valenciana con 38 e Islas Canarias con 35.
De los más de 300 ahogados en España en 2023, el 81% de los muertos han sido hombres, un total de 247 fallecidos. Por su parte, en 2022 fallecieron un total de 394 personas en los 12 meses del año.

Mayor número de ahogados en verano
Según las estimaciones del Grupo de Socorrismo de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), el 80% de los ahogados se concentra en los meses de junio, julio, agosto y septiembre, durante el verano.
En concreto, en lo que va de verano de 2023 han muerto por ahogamiento en España 187 personas, 57 de ellas en junio, 79 en julio y 51 en agosto.
No obstante, hay que tener en cuenta que los servicios de urgencias atienden cada año a entre 1.200 y 2.000 casos anuales con diferente severidad relacionadas con el ahogamiento.
«El ahogamiento es prevenible y requiere una coordinación multifactorial. Se debe cambiar el enfoque reactivo hacia uno más preventivo y estable en el tiempo que ha de sustentarse en dos pilares, la educación y formación para la seguridad en el medio acuático y el activismo en seguridad acuática», apunta Roberto Barcala, coordinador del Grupo de Socorrismo de SEMES.