Por qué nunca deberías comer nieve

Te explicamos los motivos por los que no se debe comer nieve y los riesgos que conlleva ingerirla tanto recién caída como en la superficie.

Pablo Ramos

Pablo Ramos

Salir a jugar con la nieve, realizar guerras de bolas, hacer muñecos o morder la nieve. Estas son algunas actividades que muchas personas realizan cuando se encuentran en un entorno nevado. Sin embargo, comer nieve puede traer importantes riesgos para la salud.

Por ello, desde Eltiempo.es te explicamos los motivos por los que por qué no se puede tomar la nieve.

¿Por qué no se debe comer nieve?

En el momento en el que una persona come nieve, no solo está ingiriendo agua en estado no líquido. También se está introduciendo en el organismo aquellas partículas presentes en la atmósfera o en el suelo que la nieve ha ido adquiriendo. Esto puede haberse producido en su composición o durante su reposo en la superficie.

Los copos de nieve se forman en la atmósfera y esta puede estar contaminada no por los agentes propios de ese entorno.

Partículas como la de las emisiones de automóviles, las bacterias o los nitratos de los cultivos son algunos elementos que podemos llevarnos a nuestro organismo si ingerimos nieve. Además, si la nieve cae en un entorno cercano la costa, a estas sustancias hay que sumar la sal procedente del mar.

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Todas estas partículas pasan a ser parte de la nieve durante su formación. Los copos de nieve se forman en la atmósfera y esta puede estar contaminada no solo por los agentes propios de ese entorno. También por partículas que viajan por el aire miles de kilómetros como el humo de los coches, la quema de combustibles fósiles o el polvo en suspensión.  

Esto se produce porque la nieve en su composición atrapa y contiene en sus microcristales que componen los copos todos estos elementos. De este modo, dependiendo de los tipos y niveles de contaminantes en el aire, la nieve tendrá más o menos agentes nocivos.

¿Qué pasa si uno come nieve?

Inicialmente, comer nieve puede parecer inofensivo y en la mayoría de los casos los riesgos son mínimos si la nieve ingerida es mínima. Sin embargo, debido al desconocimiento de los contaminantes que hay en ese ambiente, se recomienda no ingerir nieve y mucho menos en grandes cantidades. 

Comer nieve afecta potencialmente a la salud y tiene efectos perjudiciales en el organismo

Las sustancias, como nitratos, sustratos, bacterias, gérmenes u otros contaminantes, que pueden estar presentes en la nieve son nocivas para el organismo. Es decir, comer nieve afecta potencialmente a la salud y tiene efectos perjudiciales en el organismo. Entre ellos, bacterias como las Pseudomonas Syringae, unos de los patógenos más comunes en la nieve, pueden provocar diarreas, vómitos y malestar gástrico. Puede parecer inofensiva por su textura y su color pero sí, comer nieve da diarrea.

De este modo, para evitar estos riesgos se debe potabilizar todo el tipo de agua que se vaya a beber. El objetivo es eliminar patógenos y gérmenes que pueda contener el agua sea en el estado que sea, ya sea hielo o nieve. 

¿Cómo hidratarse con nieve? 

No obstante, en una situaciones extremas en las que no se disponga de agua líquida mano, se puede recurrir de emergencia a hidratarse con nieve, pero teniendo en cuenta una serie de factores muy importantes.

Lo primero de todo es derretir la nieve, fundirla e incluso convertir en agua para hervirla. Con ello, se pueden eliminar gran parte de las impurezas y patógenos. De esta manera se evita ingerir un líquido muy frío que puede dañar el organismo en situaciones extremas. Además, ingerir nieve puede provocar quemaduras o lesiones en la boca o los labios.

Igualmente, se recomienda, en el caso de que se disponga, recurrir a un filtro de agua a una pastilla potabilizadora para eliminar todos los riesgos. Aunque esto solo debe hacerse en casos extremos por lo que lo más recomendable es no comer, ni ingerir ni tomar nieve.