¿Qué se sabe del asteroide que extinguió a los dinosaurios?

Hace 65 millones de años, un asteroide extinguió a los dinosaurios, poniendo fin al reinado de los grandes reptiles. Pero, ¿qué se sabe de aquello?

Alejandro Riveiro

Alejandro Riveiro

Hace 65 millones de años, un asteroide extinguió a los dinosaurios, poniendo fin al reinado de los grandes reptiles. También se quedaron muchas otras criaturas por el camino. Aquel impacto fue una revolución para la vida en la Tierra. Pero, ¿qué se sabe de aquello?

Una colisión grande y relativamente frecuente.

Lo cierto es que los asteroides colisionan constantemente con nuestro planeta. Cuanto más pequeño sea el asteroide, mayor es la frecuencia de impacto. Principalmente porque, de hecho, los asteroides más pequeños son los más numerosos.

El asteroide que extinguió a los dinosaurios tenía un diámetro de unos 10 kilómetros. Algo que se determina a partir del estudio del cráter Chicxulub, al norte de la Península del Yucatán, en México. Este tipo de asteroides son mucho más raros.

El asteroide que extinguió a los dinosaurios hace 65 millones de años tenía un diámetro de unos 10 kilómetros.

De hecho, se calcula que, aproximadamente, cada 100 millones de años impacta un asteroide de ese tamaño con nuestro planeta. Evidentemente, al ser una media, quiere decir que, en ocasiones, puede pasar mucho más tiempo, y en ocasiones menos.

El último gran impacto, de esa naturaleza, fue hace 65 millones de años. Por lo que debería pasar mucho tiempo todavía, en comparación a una vida humana, hasta que se produzca el próximo gran impacto de esa naturaleza.

No hay ningún asteroide a la vista que pueda chocar con nuestro planeta en los próximos 150 o 200 años.

Naturalmente, cuanto más grande sea un asteroide, mayor cantidad de luz del Sol reflejará. Por lo que estos objetos son mucho más fáciles de encontrar y monitorizar. Se calcula que el 99% de grandes asteroides ya han sido descubiertos.

No hay ningún asteroide a la vista que pueda chocar con nuestro planeta en los próximos 150 o 200 años, entre todos los conocidos. Entre ellos se incluyen los grandes asteroides, así que podemos estar tranquilos en ese sentido.

¿Cuántos asteroides hay en el Sistema Solar?

Lo cierto es que la cantidad exacta de asteroides es difícil de estimar, pero en estos momentos ya se conocen más de 1.100.000. De ellos, alrededor de 20.000 tienen una órbita que cruza con la de la Tierra. Esto no quiere decir que vayan a chocar.

Así, podemos hablar de un concepto que suena peor de lo que realmente es. Se trata de los asteroides potencialmente peligrosos. Son aquellos que cumplen, a grandes rasgos, dos parámetros. Por un lado, que sean lo suficientemente grandes.

A fin de cuentas, los asteroides muy pequeños, simplemente, se desintegran en la atmósfera y no llegan a alcanzar la superficie del planeta. Un asteroide de, por ejemplo, un metro, no es un asteroide potencialmente peligroso.

Concepto artístico de Oumuamua alejándose del Sistema Solar. Crédito: NASA/ESA/STSc

Por otro lado, esos asteroides deben tener una órbita que se cruce con la de la Tierra, o sea lo suficientemente cercana como para que, en el futuro, las interacciones gravitacionales puedan provocar una colisión.

Esto, sin embargo, no quiere decir que se espere una colisión en un futuro más o menos cercano. Lo único que indica, en realidad, es que estos asteroides encajan en esos parámetros y por tanto son objetos que vale la pena tener controlados.

Lógicamente, tarde o temprano se producirá la colisión de un asteroide con la Tierra. Uno lo suficientemente grande como para poder provocar daños a escala local o regional. La única pregunta es cuándo, no si puede suceder.

La necesidad de poder desviar asteroides

El asteroide que extinguió a los dinosaurios fue un caso especial. La frecuencia de estos impactos es baja, especialmente en comparación a la vida de un ser humano. Sin embargo, asteroides mucho más pequeños, pero igualmente peligrosos, son un problema.

Aquel asteroide transformó las condiciones en la Tierra durante mucho tiempo. Las criaturas que no se extinguieron en el propio impacto, y en los momentos posteriores, desaparecieron al no lograr adaptarse a las nuevas condiciones del planeta.

Un asteroide mucho más pequeño, como Apofis, no es capaz de provocar un evento de extinción. Si chocase con tierra firme (hay que recordar que se ha descartado la posibilidad de colisión tanto en este siglo como en el posterior), dejaría un cráter de unos 5 km de diámetro.

Concepto artístico de un asteroide cercano a la Tierra. Crédito: NASA

Si golpease en el océano Pacífico, el tsunami desatado podría provocar millones de víctimas en las ciudades costeras. No solo el impacto en sí sería preocupante. Durante unos años, la Tierra experimentaría un cambio climático abrupto.

Apofis no va a chocar con la Tierra, pero otros asteroides puede que lo hagan tarde o temprano. Por ello, se está trabajando en el desvío de asteroides. En esencia, se envía un impactor (una nave con el único objetivo de estrellarse) para alterar su órbita.

Si está lo suficientemente lejos de la Tierra, un desvío ligerísimo, incluso de unos pocos centímetros, puede provocar que ese asteroide pase de chocar con nuestro planeta a pasar a miles de kilómetros. De ahí la importancia de misiones como DART.

¿Quién fue uno de los precursores de la celebración el día 30 de junio del Día del Asteroide?

Según diferentes fuentes, la celebración el 30 de junio del Día Mundial de los Asteroides es una iniciativa creada en el año 2014 por el Dr. Brian May, astrofísico y guitarrista del grupo Queen, Danica Remy, Presidenta de la Fundación B612, Rusty Schweickart, Astronauta del Apollo 9 y Grig Richters, cineasta.

En 2016, Naciones Unidas aprobó la resolución en la que se fijaba el 30 de junio como el Día Internacional de los Asteroides «para celebrar, cada año, a nivel internacional el aniversario del impacto de Tunguska, en Siberia (Federación de Rusia), ocurrido el 30 de junio de 1908, y para aumentar la conciencia pública sobre el peligro de impacto de los asteroides».

Sea como fuere, el 30 de junio se celebra el Día Mundial del Asteroide que tiene como objetivo recordarnos que hay amenazas para nuestro planeta que vienen del espacio.

El trabajo para catalogarlos, y entender los diferentes tipos de asteroides, está en marcha desde hace décadas, y ahora llega el siguiente paso: protegernos de ellos.