Reino Unido corre el riesgo de un «apagón a la española» por el calor extremo

El Reino Unido podria experimentar un apagón como el de España y la causa principal puede ser el cada vez más habitual intenso calor

Mario Picazo

El 28 de abril millones de personas repartidas por España, Portugal y parte de Francia experimentaron un largo apagón. En España, las regiones más afectadas fueron Madrid, Cataluña, la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Castilla y León. Se registraron interrupciones en el transporte, comunicaciones y servicios básicos

Lo ocurrido en España ha abierto un exhaustivo debate sobre las causas de un apagón de tal magnitud. Desde entonces se habla y mucho de la posibilidad de que algunos países experimenten una situación similar. Uno de ellos es el Reino Unido. Los británicos están especialmente preocupados de que las elevadas temperaturas que se registran con más frecuencia puedan desencadenar una situación similar. 

El calor extremo puede suponer una amenaza de «apagón al estilo español» para la red eléctrica del Reino Unido por varias razones clave. Muchas de ellas se deben a las limitaciones de diseño de la infraestructura, el aumento repentino de la demanda y la vulnerabilidad climática. 

El Reino Unido, uno de los países más poblados del Reino Unido podría sufrir un gran apagón similar al vivido en España sobre todo durante periodos de intenso calor. foto: Unsplash

Aumento repentino de la demanda de electricidad

En el caso del Reino Unido preocupa especialmente el calor extremo ya que aumenta la demanda de sistemas de refrigeración como el aire acondicionado y los ventiladores. Históricamente, el Reino Unido ha tenido una baja demanda de aire acondicionado, pero a medida que suben las temperaturas, cada vez más hogares y empresas lo instalan. Un aumento repentino del uso sobrecarga la red, especialmente durante las horas punta.

Las altas temperaturas también reducen la eficiencia de los componentes eléctricos, como transformadores y cables. Los sistemas de refrigeración de las centrales eléctricas (especialmente las de gas y nucleares) pueden sobrecalentarse o fallar, reduciendo su producción. La infraestructura de la red eléctrica puede sobrecalentarse o degradarse físicamente, provocando fallos o paradas de emergencia.

Volatilidad de la generación de energía renovable

La energía solar de la que ya dependen muchos países puede rendir bien con sol en abundancia. Sin embargo, disminuye cuando hace demasiado calor, ya que los paneles pierden eficiencia por encima de unos 25 grados. En el Reino Unido un 47% de la electricidad proviene de fuentes renovables. 

En el Reino Unido un 47% de la electricidad proviene de fuentes renovables. 

Comparando con el sol, la energía eólica puede tener un rendimiento inferior en verano. Es el caso especialmente cuando se producen olas de calor, ya que estas suelen estar asociadas con situaciones de aire en calma. Esta variabilidad aumenta la dependencia de fuentes de energía de respaldo, que pueden no estar disponibles de inmediato.

Limitaciones de la refrigeración por agua

La sequía puede ser un problema añadido a la hora de generar electricidad. Las centrales nucleares y las de gas suelen depender de agua de río o de mar para su refrigeración. Cuando escasea el agua por un déficit de precipitación es el proceso de generación se puede complicar

Por otra parte, durante las olas de calor, las fuentes de agua pueden calentarse demasiado o agotarse, lo que obliga a las centrales a reducir su tamaño o a cerrar. Lo que habitualmente puede ser una fuente de electricidad estable también puede pasar por momentos puntuales de inestabilidad.

Principales amenzas para la red eléctrica del Reino Unido. imágen : UK Department of Energy

El riesgo de que fallen los equipos aumenta

Las infraestructuras antiguas del Reino Unido no están diseñadas para el tipo de calor que por ejemplo experimentan los países del Mediterráneo. En ocasiones pueden fallar cuando se registran temperaturas altas de forma sostenida.

Esto puede provocar fallos en cascada en distintas regiones. Fallos de ese tipo se han dado incluso en España durante las olas de calor prolongadas. Dado que las olas de calor son cada vez más frecuentes y duran más en el tiempo en muchas zonas de Europa, este problema es uno de los que más preocupa. 

Interdependencia de la red eléctrica del Reino Unido

El Reino Unido suele importar electricidad de Europa continental a través de interconectores. Son líneas de transmisión de energía eléctrica que conectan redes eléctricas de diferentes países o regiones, permitiendo el intercambio de electricidad entre ellas. 

Facilitan el suministro de energía cuando un país o región tiene excedentes y lo necesita otro, o cuando la demanda es mayor que la oferta en una zona específica. Pero cuando varios países experimentan una ola de calor simultáneamente, las importaciones pueden disminuir, lo que sobrecarga aún más la red eléctrica del Reino Unido.

Invertir en nueva tecnologia ayudaría a modernizar la antigua red eléctrica inglesa reduciendo el riesgo de apagones. foto: Unsplash

Soluciones de futuro para estabilizar la red

Para reducir el riesgo de que falle la red eléctrica son varias las soluciones aplicables. Como con muchos otros sistemas que implican el uso de tecnología ayuda invertir.  Si se consigue modernizar la infraestructura, se pueden afrontar esas condiciones de calor extremo.

También ayuda ampliar la flexibilidad de la red, incluyendo el almacenamiento y la respuesta a la demanda. Acelerar la implementación de redes inteligentes y tecnología doméstica para gestionar la carga de forma más eficiente, puede ser fundamental. 

Finalmente es favorable que en toda red de electricidad se diversifiquen las fuentes de energía y se refuercen las cadenas de suministro. Si a eso sumamos la importancia de concienciar a la ciudadanía para reducir el consumo máximo durante condiciones meteorológicas extremas el riesgo de apagones será menor.