Todo sobre Churchill, la capital mundial del oso polar
La localidad canadiense de Churchill es conocida mundialmente por ser uno de los lugares con mayor concentración de osos polares.
Pablo Ramos
Los osos polares son unos animales únicos. Viven en las zonas más frías y heladas del hemisferio norte. El vasto territorio en el que habitan, el escaso número de ejemplares actuales y su delicado estado de conservación hace que sean muy difíciles de observar.
Sin embargo, existe un lugar en el mundo idóneo para ello. Se trata de Churchill, un pequeño pueblo de unos 900 habitantes. Está situado al norte del estado de Manitoba, en Canadá (en plena bahía Hudson).
Churchill, el hogar de los osos polares
La pequeña ciudad de Churchill es conocida como la capital mundial del oso polar. Un título que ostenta por la relativa facilidad con la que se pueden observar estos animales en su entorno.
Se estima que en el entorno de este pueblo habitan unos 1.200 osos polares. Un una densidad poblacional de osos polares alta, ya que se trata de un área relativamente pequeña. De hecho, hay más osos polares que habitantes. Y es que el censo estima que la población de esta ciudad canadiense es de unos 900 habitantes.
En cuanto a las temperaturas, Churchill registra unas temperaturas medias de unos 12ºC en verano y en torno a -27ºC en invierno. Para llegar a la ciudad de Churchill se debe llegar por barco, avión o vía ferrocarril.
Aunque es conocida como la capital del oso polar, en Churchill también pueden realizarse otras actividades, la observación de auroras boreales de enero a marzo y de finales de agosto a principios de septiembre, y de otros animales como ballenas belugas, más de 200 especies de aves y parajes naturales únicos.
Áreas protegidas para osos polares
Con la llegada del frío durante los meses de octubre y noviembre, los osos polares acuden a los alrededores de la bahía de Hudson. Lo hacen, de hecho, cuando las aguas se congelan, en búsqueda de su principal alimento: las focas.
Sin embargo, observarlos no es fácil y se recomienda acudir con un guía especializado. Además, Churchill tiene dos áreas de especial protección y conservación de los osos polares: Cape Churchill y Cape Tatnam.
Son espacios que sirven para proteger extensiones significativas de la costa sur de la Bahía de Hudson y cerca de la frontera con el estado de Ontario.
Estas áreas protegen los frágiles ecosistemas costeros y de tundra que sirven de hábitat para los osos polares y también para otros animales, como caribúes y gansos. De hecho, alrededor de estos espacios hay una gran variedad de opciones de tours disponibles para ver osos polares en su estado natural y de manera segura.
Las autoridades de Churchill recomiendan contratar un guía experto o un monitor de osos para este tipo de actividades. Y es que los osos polares son muy ágiles a pesar de su gran tamaño. Es más, estos plantígrados blancos pueden captar un olor a más de 30 kilómetros de distancia y pueden detectar la presencia de focas bajo un metro de nieve y hielo.
“Es relativamente seguro caminar por la ciudad durante la temporada de osos, ya que Manitoba Conservation tiene un programa de alerta de osos polares. Este patrulla continuamente la ciudad para mantener alejados a los osos”, detallan las autoridades.
¿Cuántos osos polares hay en el mundo?
La «Lista Roja de especies amenazadas» que realiza la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN) señala que el oso polar se encuentra en un estado de conservación vulnerable, cerca del peligro de extinción.
Se estima que actualmente existen entre 22.000 y 31.000 osos polares en el mundo. Y están repartidos por las zonas más frías del hemisferio norte. Por ejemplo, en países como Canadá, Groenlandia, Alaska, Noruega o Rusia.