Un terremoto de magnitud 4,3 sacude el golfo de Cádiz durante la madrugada

El seísmo ha sido sentido por la población y ha provocado incidencias en el suministro de agua en Puerto Real

Redacción

El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha confirmado la detección de un terremoto de magnitud 4,3 en la madrugada de este lunes 24 de marzo, con epicentro en aguas del golfo de Cádiz, al suroeste de la península ibérica.

El seísmo se ha producido a las 06:18 horas a una profundidad de ocho kilómetros, y ha sido percibido por la población de varias localidades andaluzas.

Una serie de temblores en el golfo de Cádiz

Según los datos del IGN, este terremoto ha estado acompañado por otros tres seísmos de menor magnitud registrados en la misma región. El primero ocurrió a las 05:49 horas, con una magnitud de 2,4; el segundo fue el de mayor intensidad, a las 06:18 (M 4,3); y posteriormente, a las 07:05, se produjo otro de magnitud 1,9. Un cuarto temblor, de 1,8 grados, fue detectado una hora más tarde.

Aunque las magnitudes de estas réplicas han sido bajas, el registro de varios eventos en un corto intervalo de tiempo ha llamado la atención de los expertos. Pese a ello, no se han reportado daños materiales de relevancia ni personas heridas, y los servicios de emergencia no han recibido avisos por parte de la ciudadanía.

Una región sísmicamente activa

La zona donde se han producido estos seísmos se encuentra en el entorno de la conocida zona de fractura Azores-Gibraltar, una región tectónicamente activa que actúa como límite entre las placas litosféricas de Eurasia y África. Este sistema de fallas, que se extiende desde el archipiélago de las Azores hasta el estrecho de Gibraltar, genera con frecuencia microsismos diarios.

En ocasiones, estos alcanzan valores moderados o incluso elevados, como ocurrió en 1969, cuando un sismo de magnitud 8,0 sacudió la región, o el histórico terremoto de Lisboa de 1755, que superó los 8,5 grados.

Aunque la mayoría de los terremotos registrados en esta área tienen magnitudes bajas y pasan desapercibidos para la población, los expertos recuerdan que se trata de una región con actividad sísmica permanente. El IGN mantiene una vigilancia constante de estos eventos para valorar posibles riesgos y prevenir impactos mayores.

En el caso del temblor de esta madrugada, su magnitud ha sido suficiente para que haya sido notado por los habitantes de la costa andaluza, aunque sin consecuencias graves. No obstante, las autoridades locales permanecen atentas ante posibles réplicas y han reforzado la monitorización de infraestructuras clave, especialmente en áreas como Puerto Real, donde se han producido afectaciones en servicios básicos.