Una turista española muere tras ser atacada por un elefante en Tailandia

La turista española se encontraba bañando a un elefante cuando este la atacó mortalmente con sus colmillos

Redacción

Una turista española ha fallecido tras ser atacada por un elefante en un centro de elefantes en la isla de Yao Yai, Tailandia. La tragedia ocurrió durante una actividad aparentemente inofensiva, donde la turista estaba bañando al animal.

Este incidente se suma a una serie de ataques que han resultado en 30 víctimas mortales en el país asiático durante el último año, según estadísticas del departamento de Parques Nacionales. Estos datos reflejan una realidad preocupante en la que la interacción entre elefantes y humanos puede tener consecuencias fatales.

La turista española sufrió heridas de tal magnitud provocadas por los colmillos del animal que nada pudieron hacer por su vida.

El «Koh Yao Elephant Care» es un centro ubicado en la isla de Yao Yai, en Tailandia, que se especializa en ofrecer experiencias turísticas centradas en el cuidado y la interacción con elefantes. En su sitio web, el centro promueve un enfoque de «turismo responsable», donde los visitantes tienen la oportunidad de aprender sobre la vida diaria de estos animales y participar en actividades como bañarlos y alimentarlos, todo bajo la premisa de no controlar ni atar a los elefantes durante las actividades.

Este centro se presenta como un refugio para elefantes donde se promueve el bienestar de los paquidermos, alejándose de las prácticas turísticas más controvertidas como los paseos en elefante y los espectáculos que pueden causarles estrés o daño.

A pesar de ser criaturas generalmente pacíficas, los elefantes pueden ser peligrosos, especialmente cuando sienten amenazada su seguridad o su territorio. La mayoría de los ataques reportados provienen de encuentros con elefantes salvajes, que a menudo se ven forzados a adentrarse en áreas pobladas debido a la destrucción de su hábitat natural.

A pesar de ser animales pacíficos, los elefantes pueden atacar al sentirse amenazados

El departamento de Parques Nacionales de Tailandia estima que existen más de 4.000 elefantes salvajes en parques y reservas naturales del país, una cifra que, aunque en aumento, es significativamente menor a los 300.000 que se estimaba existían hace más de un siglo. Paralelamente, hay una población similar de elefantes domésticos, muchos de los cuales son utilizados en espectáculos turísticos.

Desde la prohibición de la tala en 1989, los elefantes que anteriormente eran empleados en la industria de la carpintería han sido reubicados en centros turísticos y espectáculos. Estas actividades, aunque populares entre los visitantes, a menudo no consideran el bienestar de los animales y pueden llevar a situaciones de estrés que desencadenan reacciones agresivas.

El trágico evento ha resaltado la necesidad de una mayor conciencia y regulación en la interacción entre turistas y elefantes, para garantizar la seguridad de ambas partes y preservar la majestuosidad de estos animales en su entorno natural.