Vórtice polar, «bestia del este», bloqueo atmosférico… ¿Qué está pasando?

Bloqueo atmosférico, vórtice polar o «bestia del este» son términos que estarás leyendo estos días. ¿Son verdad? ¿Qué relación guardan con las lluvias?

Roberto Granda

Roberto Granda

Hace unos días analizábamos la posibilidad de que el poderoso bloqueo atmosférico entre Rusia y Escandinavia pudiera derivar en una entrada fría continental sobre Europa o, bautizada popularmente también, como «bestia del este». Sin embargo, ¿de dónde venía el término empleado, «bestia del este»? Además, ¿qué relación guarda con el vórtice polar o el bloqueo atmosférico? ¡Te lo contamos!

VÍDEO: QUÉ IMPLICA UNA RUPTURA DEL VÓRTICE POLAR

¿A qué nos referimos cuando hablamos de bloqueo atmosférico?

Vayamos por partes. Lo primero de todo es saber a qué nos referimos cuando hablamos de un bloqueo atmosférico. Este término gana peso en ciertas épocas del año, como verano o invierno. Sin embargo, ¿qué es?

Cuando los meteorólogos hablamos de bloqueo atmosférico hacemos referencia a una situación en la cual se genera un área de altas presiones en superficie, generalmente acompañada también de estabilidad en altura, en el nivel de los 500 hectopascales (hPa) (a unos 5500 metros).

Las zonas atmosféricas de alta presión suelen perdurar en el tiempo, ya que son más «robustas» que las áreas inestables. Así pues, si un bloqueo se forma, condicionará la circulación atmosférica durante días o semanas. En este caso, hablamos de un bloqueo en altas latitudes, lo que puede modificar la circulación a escala de todo el hemisferio norte.

El bloqueo de diciembre de 2022

En esta ocasión, el bloqueo se ha iniciado entre Rusia y Escandinavia. Una fuerte zona de altas presiones se ha formado en dicha región, ganando intensidad con cada día. Con el paso de las jornadas, las previsiones indican que el bloqueo podría desplazarse hacia el oeste. Esto provocaría que, llegado el caso, se extendiera desde Groenlandia hasta Rusia.

Previsión del bloqueo de cara al próximo fin de semana. Fuente: eltiempo.es

El bloqueo anticiclónico limita los movimientos del aire. Esto, sumado a la innivación del suelo en estas fechas, hace que el aire junto a la superficie se enfríe rápidamente. Así pues, debajo de las altas presiones se forma una masa de aire frío, que a su vez retroalimenta al anticiclón (el aire frío es más denso que el cálido).

¿Cuáles son las posibles consecuencias de este bloqueo atmosférico ruso-escandinavo en invierno? Los escenarios son múltiples, pero para el interés de España, suele haber dos escenarios principales (y en ocasiones compatibles): una potente entrada de aire frío continental (que en el pasado se ha llamado «bestia del este») o la apertura del atlántico, con la llegada de lluvias.

La apertura del atlántico: NAO- y bloqueo

El escenario de las lluvias pasa por un bloqueo que se forme al sur de Groenlandia o se expanda hacia el oeste desde Escandinavia. Si lo hace, y además lo hace a la latitud adecuada, la circulación de las bajas presiones se verá forzada más al sur.

De ser así, las lluvias llegarían a la península ibérica, con un ambiente templado y húmedo. Son estos episodios de NAO- acusada los que suelen traer las mayores lluvias a gran parte del país. El último gran episodio de NAO- fue el del invierno de 2009-2010, que dejó cantidades de lluvia muy elevadas.

vórtice polar bloqueo NAO-
Patrón de NAO-. Fuente: eltiempo.es

Ahora bien, ¿qué es la NAO? La NAO es la «North Atlantic Oscillation» (oscilación del Atlántico norte). Es un valor de teleconexión que se define en función de la presión atmosférica en el Atlántico norte. Si su valor es negativo, las bajas presiones circulan más al sur. Si es positivo, al contrario.

La entrada fría continental

Si el anticiclón de bloqueo se coloca adecuadamente, su disposición establecería un flujo de vientos del noreste sobre Europa. Esto trasladaría la masa de aire frío rusa hacia el resto del continente. Hace unos años, una de estas fuertes entradas fue llamada «la bestia del este» en Reino Unido. No es más que una forma de denominar a la entrada fría continental.

Estas entradas de aire frío continental se caracterizan por traer temperaturas extremadamente bajas al continente Europeo, y suelen estar detrás de los récords de frío en muchas zonas del continente. Además, aunque la masa en origen es seca, su paso por océanos o la llegada de alguna borrasca desde el Atlántico puede provocar nevadas, especialmente en Europa occidental.

¿Y el vórtice polar?

El vórtice polar es una gran área de aire frío sobre el polo norte. El vórtice polar tiene dos partes: el vórtice polar estratosférico y el vórtice polar troposférico. El primero se ubica en la estratosfera, entre los 15 a 50 km. El segundo se sitúa en la troposfera, por debajo de los 15km.

vórtice polar
El vórtice polar, bajo condiciones normales, se intensifica a lo largo del invierno. Fuente: eltiempo.es

Cuando se habla del vórtice polar y sus rupturas, se suele hacer referencia al vórtice polar estratosférico. Esta zona de fuertes vientos y aire muy frío, contenida en el polo norte, puede ser determinante en el tiempo invernal. En condiciones normales se enfría (y acelera) a lo largo del invierno.

Sin embargo, si produce un calentamiento súbito estratosférico (propiciado por fenómenos en la troposfera), el vórtice puede romperse. De romperse, su inestabilización puede propagarse a capas inferiores, afectando al vórtice polar troposférico y alterando la configuración atmosférica fuertemente.

La otra parte del vórtice polar, la troposférica, suele hacer referencia al aire contenido al norte de la corriente en chorro y a cierta altitud, en el caso del hemisferio norte. Las roturas de este vórtice troposférico tienen consecuencias rápidas, al cambiar los patrones atmosféricos a nivel hemisférico.

¿Estamos ante una ruptura del vórtice polar por el bloqueo atmosférico?

Se está comentado que el vórtice polar se va a romper y va a provocar la llegada del crudo invierno. ¿Qué hay de verdad en esto? Si nos referimos al vórtice polar estratosférico, es mentira: no sólo no hay indicios de ruptura a medio plazo, sino que además estaría más fuerte de lo que sería normal.

vórtice polar bloqueo zonal
Predicción del viento a la altura del vórtice estratosférico. Cuanto más positivo, más fuerte. Fuente: ECMWF

Si nos referimos al vórtice polar troposférico, en ese caso sí tenemos una situación que apunta a una cierta ruptura. El vórtice polar se vería afectado por el bloqueo atmosférico ruso-escandinavo, que probablemente se propague hacia el Ártico y Groenlandia en próximas jornadas. Esto provocaría la desorganización de la circulación atmosférica, con aire frío descolgándose hacia latitudes inferiores.

Como vemos, el bloqueo atmosférico podría afectar al vórtice polar troposférico y determinar el tiempo en futuras semanas. No obstante, la incertidumbre es máxima, así que toca seguir las previsiones más actualizadas.