¿Por qué en 2021 es un buen momento para pasarte al eléctrico?
La Semana de la Movilidad con
Ponemos fin a la 20 Semana de la Movilidad. Esta edición, se ha hecho un gran esfuerzo educativo sobre los vehículos electrificados. Si sigues teniendo miedo al cambio, esto te interesa
España, que continúa siendo líder de participación de la Semana Europea de la Movilidad, ha contado este 2021 con la participación de 400 municipios. Cada uno con su propia agenda, pero todos ellos con un gran reto compartido: ver cómo crecen los eléctricos (e híbridos) en nuestras calles.
Suenan a futuro pero han sido claves en el pasado. A principios del siglo XX los eléctricos representaban la mayoría del parque de vehículos y no fue hasta la bajada del precio del crudo cuando empezó a imponerse el motor de combustión en los garajes y calles del planeta.
España es, con un 167% de crecimiento, el cuarto país de Europa que más ha crecido en la venta de eléctricos en la última década
Más de un siglo después y con la sostenibilidad insertada nuestro día a día, sus ventas se han visto disparadas. Según datos de ANFAC, las ventas de eléctricos en los primeros ocho meses de 2021 crecieron más de un 53% con respecto al año anterior. Si miramos a los últimos años, el panorama es aún más halagüeño. Somos, con un 167% de crecimiento, el cuarto país de Europa que más ha crecido.
Uno de los mejores ejemplos es BMW. La marca alemana acaba de incorporar dos nuevos modelos (iX e i4) a su gama de cero emisiones, que se suman a los modelos i3, i3s e iX3. ¿El objetivo? Ahorrar hasta en un 80% las partículas de CO2 por vehículo en 2030. Respondemos a las dudas más habituales de los conductores.
¿No es demasiado caro?
El precio de estos vehículos para 2025, según un análisis de Bloomberg NEF, será un 36% más bajo que el de los vehículos de combustible fósil. Un factor que va unido al progresivo abandono del concepto de propiedad. El informe de Movilidad del Futuro de AECOC apunta más del 50% de los nativos digitales se plantea no tener un coche en propiedad. Opciones como el renting ganan peso y en esa modalidad, los eléctricos cobran importancia: Según la Asociación Española de Renting, 1 de cada 3 coches eléctricos matriculados son de renting.
Mantenimiento más sencillo
Mantener un vehículo eléctrico es, en contra de la creencia popular, más sencillo que mantener uno tradicional. La razón es que este dispone de elementos menos susceptibles al deterioro, lo que puede derivar en un 25 o 30% de ahorro respecto a un vehículo de combustible y, por otro lado, una probabilidad menor de avería.
No obstante, si es importante tener que la batería sí experimenta desgaste y normalmente es necesario reemplazarla cada 10 u 12 años.
¿Cuánto tiempo voy a poder circular con coches no electrificados?
La Nueva Ley de Cambio Climático, que tiene como meta que España sea neutra de emisiones en 2050, fija como uno de sus puntos clave poner fin a la venta de vehículos de combustión. En concreto, en 2040 ya se no se podrán comprar coches de diesel, gasolina o híbridos.
Una restricción que se une a otra de aplicación más tempranda: crear zonas de bajas de emisiones en ciudades de más de 50.000 personas, una medida que ya existe en ciudades como Madrid, Barcelona, Valladolid o Sevilla. Una razón más para que tu próxima adquisición sea un eléctrico.
El gran reto: la facilidad de recarga
Un informe reciente de ANFAC y Faconauto, sostiene que para alcanzar los tres millones de vehículos electrificados que propone la administración española para 2030 deberían existir más de 340.000 puntos de recarga, lo que significa que en lo que resta de década el número actual se debería multiplicar por 30 (cuenta con más de 11.500).
Si la penetración de la red es crítica, también lo es el precio de la recarga. En este campo, el eléctrico le gana la batalla al resto de alternativas. Según el Ministerio de Transición Ecológica, el coste doméstico de recargar un eléctrico está en 2,27 euros cada 100 kilómetros. Cifra muy inferior a los 7,76€ de media que costaría recorrer esa misma distancia con un vehículo de gasolina.
Y la última variable: el tiempo. ¿Cuánto se tarda en 2021 en recargar un eléctrico? Los planes del Gobierno y el tejido empresarial es ir reduciendo año a año los minutos. En el presente, cargar un eléctrico en un entorno doméstico puede llevar entre 5 y 8 horas. En un punto de los denominados “semirápidos” (ya sean públicos o privados) la recarga oscila entre 1 y 3 horas, mientras que los puntos rápidos de las estaciones de servicio o electrolineras el tiempo se reduce a un máximo de 30 minutos. Es la opción más cara, pero sin duda supone un ahorro de tiempo significativo.
Conducción más responsable (y cómoda)
En el ciclo de vida de un eléctrico (desde su fabricación hasta su uso y recarga) se genera huella de carbono, no obstante, es innegable que el simple hecho de que no emitan gases contaminantes a la atmósfera es un factor clave para mejor la calidad del aire y la salud de nuestras ciudades y pueblos.
Una conducción más verde y más cómoda: al no haber motor, no hay ruido, simplemente un ligero zumbido y el sonido del roce de los neumáticos contra el asfalto. Una sensación que agrada a muchos de los usuarios medios de este tipo de vehículos. Y por último también una conducción más sencilla: al no haber embrague y cambio de marchas, lo único que debemos hacer es acelerar y frenar. Fácil e instantáneo.