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La rutina capilar que salvará tu pelo y evitará que tengas que cortar a la vuelta de vacaciones

Si adoras tu melena y sufres cuando se acercan a ella las tijeras, este año no vas a tener que cortarla en septiembre para recuperar la vitalidad que tenía antes de la playa, la piscina y los daños del verano.

¿A quién no le gusta pasarse el verano en remojo? Playas, piscinas, ríos y embalses nos salvan cada año de las altas temperaturas que azotan durante estos meses la Península. Estas actividades, sin embargo, se juegan cada año una víctima: la vitalidad de tu pelo, que vuelve a septiembre con menos brillo y con más puntas abiertas.

Pero es que el verano no está hecho para preocuparse. Los planes a todas horas y los juegos y actividades que solo puedes hacer durante esta temporada bajo el sol, en la playa y la piscina te dejarán los mejores recuerdos de estos meses. Entonces, ¿por qué ibas a estar pensando en privarte de ello solo por salvar tu pelo?

Te traemos los mejores trucos y consejos para que tu cabello no sufra por el paso del verano y no tengas que cortar a la vuelta de vacaciones, ¡toma nota!

Los protectores solares capilares, ¡imprescindibles!

Al igual que la cara y el resto del cuerpo, es importante proteger el pelo de los daños que se producen con la incidencia de los rayos del sol sobre las fibras capilares. Para evitarlo, no olvides aplicar protección solar capilar cada vez que lo tengas expuesto al sol, además de protegerlo con tus accesorios favoritos como sombreros, gorras y gorros de todo tipo. 

Lávalo siempre con agua tibia y finaliza con agua fría

¿Sabías que el agua fría cierra las escamas de la cutícula de tu pelo? Además de lavarlo con agua tibia para evitar al máximo las altas temperaturas sobre tu cabello, prueba este truco y termina el lavado con unos segundos de agua fría que, además, ahorrarás en agua caliente y terminarás tu ducha de la forma más refrescante. ¡Te engancharás a él!

Evita secadores, planchas y moldeadores

Lo mejor del verano es que puedes aprovechar el calor para que tu pelo se seque de forma natural, evitando herramientas cuyo calor extremo puede dañar tu pelo. Por eso, péinatelo al salir de la ducha y deja que los últimos rayos de sol del día sean los que te lo sequen. Si vas a peinarte para un día especial y tienes que recurrir a planchas y moldeadores, no te olvides del protector térmico, ¡nunca debe faltar!

Mascarilla hidratante una vez por semana

Darle un plus de hidratación a tu cabello durante el verano no está de más. Por eso, opta por mascarillas hidratantes una vez cada siete días, más o menos, para, además de dedicarte un ratito a cuidarte y mimarte, darle la hidratación que necesita tras unos días de sol, playa o piscina. Siempre, como dicen los expertos, de medios a puntas.