Curiosidades de las tortugas marinas para niños y consejos para protegerlas

Capaces de hacer migraciones de miles de kilómetros y devoradoras voraces de medusas, las tortugas marinas celebran hoy su Día Mundial.

María José Montesinos

María José Montesinos

Cada 16 de junio se celebra el Día Mundial de las Tortugas Marinas: capaces de hacer migraciones de miles de kilómetros y devoradoras voraces de medusas

Las tortugas marinas son unos de los animales favoritos de los niños, y cada vez aparecen con más frecuencia en las playas mediterráneas. “Hay siete especies distintas de tortugas en el mundo, pero en España tenemos dos: la tortuga laud, que es la menos frecuente, y la tortuga boba (Caretta caretta), que es el 90% de los ejemplares que se ven en las costas españolas”, explica Adolfo Marco, investigador marino de la Estación Biológica de Doñana, del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas).

La tortuga boba (Caretta caretta) fue bautizada así por los pescadores por su carácter confiado. Fuente: Pexels

«A los niños les hace muchas gracia el nombre de tortuga boba. Se lo pusieron los pescadores porque es muy confiada, y cuando el agua del fondo está fría sube a la superficie y se queda flotando al sol, y era muy fácil cogerlas”, relata este investigador.

No son rápidas, pero resultan unas nadadoras incansables. Saben orientarse perfectamente, incluso desde muy pequeñas

Entre las características de las tortugas marinas destaca su gran tamaño: “La tortuga boba puede llegar a pesar 100 kilos y medir un metro de longitud”. No son rápidas, pero resultan unas nadadoras incansables: “Les hemos puesto emisores y les hemos visto recorrer 4.000 km en 3 meses”, explica Marco.  “Son capaces de orientarse fenomenalmente, incluso desde muy pequeñas, no sabemos por qué, probablemente son capaces de detectar el geomagnetismo terrestre”, apunta este biólogo.

Cambios en sus costumbres de reproducción

Tradicionalmente, las tortugas marinas “han venido a España de juveniles en busca de alimentación”, explica Marco. ¿Y qué comen las tortugas marinas? Pues, al contrario que algunos niños: “Comen de todo”, afirma el experto, “pero siempre en mar abierto”. Aunque si hay un alimento que les gusta a las tortugas marinas son “las medusas, son capaces de devorar bancos enteros, no les afecta el veneno”, destaca Adolfo Marco.

Las tortugas marinas son capaces de nadar miles de kilómetros en sus migraciones. Fuente: Pexels

Así que hacen para nosotros un gran servicio de control de esta especie tan molesta. “Las tortugas marinas también comen peces muertos o enfermos, de manera que realizan también una gran función biológica para mantener los mares limpios”, añade.

El cambio climático ha cambiado las costumbres de la tortuga boba, y ahora eligen las costas mediterráneas para poner sus huevos

Las tortugas marinas, además de ser bonitas, hacen muchos trabajos útiles para el ser humano. Otra de las curiosidades de las tortugas marinas es que se reproducen poniendo sus huevos en las playas. Antes, preferían las aguas cálidas del trópico para la época de cría, pero con el cambio climático “desde hace unos 20 años estamos viendo que las tortugas marinas vienen a las costas españolas del Mediterráneo a poner sus nidos”, afirma Marco.

Cómo nacen las tortugas marinas

Tenemos la suerte de que las tortugas marinas han elegido España para poner hacer sus nidos. Porque ¿os habéis preguntado alguna vez cómo nacen las tortugas marinas? La hembra sale del mar para hacer un nido en la playa y deposita unos 80-100 huevos, de los que aproximadamente de la mitad nacerá una tortuguita. Suelen hacerlo de noche, pero a veces pueden desovar también por el día.

¿Qué hacer si nos encontramos una tortuga marina en la playa?

¿Qué hacer si vemos a una tortuga marina saliendo a la playa a poner sus huevos? “Tenemos que ponernos detrás de ella, y no hacer ruido, que no se dé cuenta de que estamos, porque si nos ve, regresará corriendo al mar y además ya nunca vendrá a esa playa a poner huevos”, explica Marco. “Podemos verla, pero sin molestarla, nada de tocarla, ni de hacerse fotos que la asusten con el flash”, explica el biólogo.

Aunque viven en el mar, salen a la playa a poner sus huevos. Fuente: Pexels

Lo que debemos hacer si encontramos a una tortuga marina poniendo sus huevos es “llamar al 112; ellos se ocuparán de llamar a algún experto que rápidamente llegará y vallará la zona para que no se estropee el nido porque alguien camine por encima o pase la máquina que limpia la playa”, señala Marco.

Si vemos a una salir del mar debemos ponernos detrás de ella para que no nos vea y se asuste. Nada de tocarla o hacerse fotos

Cuidados que debemos tener para proteger las tortugas marinas

Además, vigilará que el proceso vaya  bien y, cuando llegue el momento de que nazcan las tortuguitas, “podremos verlo, sin molestarlas”, dice el investigador. Cuando nacen, las tortugas marinas son muy pequeñas, en comparación con el tamaño que alcanzarán de mayores, cuando salen de los huevos apenas miden 6-7 centímetros y pesan unos pocos gramos, pero “ya saben perfectamente moverse por el mar y están preparadas para alimentarse”.

Una tortuga marina escapa de unas redes de pesca. Fuente: NOAA

Uno de los peligros a los que se enfrentan las tortugas marinas puede ser las molestias de la gente, pero más grave es el riesgo de que caigan en las redes de los pescadores o en los anzuelos. “Si pasa eso, los pescadores llaman al 112, y también se ocupan de ellas”. Las que han sido heridas pueden recuperarse en un acuario, donde también podemos ir a verlas.

VIDEO: CIENTOS DE TORTUGAS MARINAS BEBÉ, LIBERADAS EN NICARAGUA

Adolfo Marco advierte de una amenaza más grave para las tortugas: “Los plásticos en el mar, la tortuga se lo come todo, ve algo flotando y se lo traga; además, también acaban en su estómago el plástico que han ingerido las especies que captura, como las medusas”. Los investigadores han detectado que “algunos de los compuestos químicos que llevan pasan a la sangre de las tortugas y las envenenan”.

Una tortuga a los pocos días de nacer, con sus cuidadores del Oceanoigráfic de Valencia. Fuente: Fundación Oceanografic

Este biólogo llama la atención sobre los daños que pueden sufrir las tortugas por las hélices de las embarcaciones. “Si vamos en una lancha o en una moto de agua y vemos una tortuga marina, mejor que paremos el motor hasta alejarnos para no correr el riesgo de hacerles daño”, recomienda.

Al rescate de las tortugas marinas

La Fundación Oceanografic de Valencia es una de los que se ocupan de curar a las tortugas marinas que han sufrido daños por colisiones con hélices o por artes de pesca. Algunas de estas tortugas marinas en proceso de curación se pueden ver por todos los que visitan el acuario del Oceanografic, dentro de la entrada general. Además, es posible visitar el laboratorio donde se recuperan, con una entrada especial, una actividad en la que también pueden participar los niños.

Con la cría controlada, se logra que las pequeñas tortugas marinas lleguen al mar más preparadas para sobrevivir a sus depredadores

También en la Fundación Oceanografic han rescatado huevos de nidos para incubarlos en sus instalaciones. Con esta cría controlada, en la que se cuida de la tortuga marina en sus primeros meses, consiguen que, cuando las suelten para ir al mar, estén más preparadas para sobrevivir a sus depredadores. Esas sueltas, así como las que se realizan con las tortugas marinas heridas y que ha sido recuperadas, se abren a las participación de los colegios, y es una de las actividades de tortugas marinas para niños con la que más disfrutan.

VÍDEO: ANIDACIÓN MASIVA DE TORTUGAS MARINAS DURANTE EL CONFINAMIENTO POR LA COVID