Cómo limpiar la calima: los 5 métodos más eficaces  

Consejos para limpiar la calima y el polvo en suspensión que ensucia casas, patios, terrazas y coches.

Pablo Ramos

Pablo Ramos

La calima es un fenómeno meteorológico que cubre de polvo en suspensión la atmósfera y a la altura del suelo. En el caso de España, la gran mayoría de las veces esta calima son partículas de arena procedentes del norte de África y del Sáhara. Aunque también puede deberse a otras partículas como polvo, cenizas o arcilla procedentes de otros lugares o como consecuencia de otros fenómenos, como los incendios. 

Su recogida y limpieza puede ser realmente molesta y complicada, al ser partículas muy pequeñas. Estos son 5 métodos eficaces para limpiar la calima de casas y coches. Y también otros consejos que ayudan a retirar el polvo en suspensión sobre las superficies de ventanas, patios y terrazas.

Consultar la previsión meteorológica de calima 

Uno de los primeros aspectos que se deben tener en cuenta es la previsión meteorológica de calima. De este modo, se pueden tomar decisiones de una forma más eficaz, como cubrir los elementos exteriores. También es positivo conocer con exactitud cuándo es el mejor momento para comenzar a limpiar la calima para evitar retirarla en vano.

Cuando se producen este tipo de fenómenos, la calima suele cubrir de polvo todos los elementos y objetos que se encuentran al aire libre. Una circunstancia que ensucia y que puede llegar a causar importantes problema.

Especialmente en filtros de ventilación de aparatos como los aires acondicionados y climatizadores, por lo que recomienda limpiarlos con mascarilla.

calidad del aire madrid calima marzo 2022

Consejos y métodos para limpiar la calima 

  • Utilizar agua a cierta presión 

Uno de los métodos más eficaces para limpiar la calima es recurrir al agua de forma abundante, más aún cuando tiene cierta presión. La fuerza del agua cumple una doble función.

Por un lado, el agua arrastra el polvo de la calima, lo deposita en el suelo, por lo que acaba en los desagües y alcantarillas. Además, al humedecer el polvo, se evita que siga en el ambiente, pese más y que caiga al suelo. Por esta razón resulta más fácil retirarlo y limpiar la calima en cualquier objeto. Ya sean muebles de exterior o un coche. 

Por otro lado, la presión del agua puede facilitar la eliminación del polvo procedente de la calima de una forma más rápida. Sobre todo, en lugares de difícil acceso como esquinas, recovecos y otros puntos.

En ese caso, el aire a presión también puede contribuir a eliminar la calima. Sin embargo, al soplar o aspirar el polvo, éste no cae al suelo y puede permanecer en el ambiente. 

  • Usar agua tibia para limpiar la calima 

Otro método útil es utilizar agua tibia. En muchas ocasiones, la calima puede venir acompañada de la conocida lluvia de sangre o lluvia de barro. Ello hace que el polvo se quede incrustado en los cristales de las ventanas u en otros elementos exteriores. 

Al usar agua tibia con algún tipo de jabón o detergente, se facilita la limpieza del polvo y de la calima. Especialmente de elementos como los cristales de las ventanas y de los coches. Incluso de otros elementos, como muebles de exterior. 

  • Mejor higienizar con paños de fibras 

Para limpiar la calima de superficies que puedan dañarse, ya sean cristales, metales pulidos o la chapa de los coches, lo adecuado es utilizar un paño de fibras humedecido. 

Permite retirar en cada pasada una buena cantidad de calima. También se evita rayar y dañar este tipo de superficies. Simplemente, con un cubo de agua con detergente neutro (o simplemente con agua) se puede enjuagar el trapo de fibras y repetir con el paño limpio cada operación.

como-limpiar-calima-consejos (2)
  • La dirección, de arriba hacia abajo 

Otra alternativa segura es limpiar la calima de una superficie es comenzando desde la parte superior y hacia la zona inferior. Fregando primero los puntos más elevados y altos, se contribuye a que la calima caiga al suelo. De esta manera, no se manchan otras zonas con cada pasada de agua limpia o del paño de fibras.

Si se hace de esta manera, la limpieza de la suciedad procedente del polvo en suspensión es más eficiente y con menos ‘pasadas’. Este orden contribuye a limpiar antes y reducir las posibilidades de dañar los objetos en su higienización.

  • Barrer y fregar en profundidad

Las zonas exteriores como las terrazas, balcones y patios son los espacios que más suciedad acumulan cuando se produce un episodio de calima. En estos casos, lo más conveniente es barrer el polvo de forma repetitiva, sin humedecer.

Con ello se evita formar una pasta de barro que ensucie aún más los productos de limpieza.  Se debe repetir la operación hasta retirar todo el polvo y suciedad posible.

Una vez bien barrido, se recomienda fregar el piso con intensidad con el producto que convenga en cada tipo de suelo. Por ello, antes de comenzar el fregado, el suelo debe estar libre de polvo para no ensuciar la fregona de forma excesiva.