Sandskiing: la alternativa al esquí cuando no hay nieve

No siempre hay nieve en las montañas. Bien porque nos encontremos en estaciones del año en las que este «oro blanco» escasea o por la incesante huella del cambio climático que aumenta la irregularidad de las nevadas durante los meses más fríos del año.

Sin embargo, los amantes del esquí y el snowboard, y en general, de los que les encanta deslizarse por las montañas subidos a cualquier cosa, tienen una alternativa más que divertida para «quitarse el mono» en momentos en los que no tenemos nieve.

Ante la escasez de nieve, en especial en aquellos entornos en los ni siquiera cae un copo, las empresas han agudizado su ingenio. Para gozar de las sensaciones únicas que ofrecen los deportes de invierno en otros entornos como las grandes dunas, hace unos años se desarrolló la idea del sandskiing y sandboarding.

¿Qué es el Sandskiing y el Sandboarding? 

El sandskiing es una modalidad deportiva que utiliza un equipamiento similar al del esquí para deslizarse por las dunas de arena. Por su parte, el sandboarding requiere una tabla parecida a la de snowboard para descender.

Estos deportes todavía son algo minoritarios en España pero el afán de aventura, adrenalina y novedad de miles de personas ha propiciado que estas actividades sean cada vez más practicadas aunque aún están muy lejos de ser populares. 

Sandskiing en España 

En España tanto el sandskiing como sandboarding son deportes minoritarios y a nivel oficial no tiene ninguna representación deportiva ni federación.

Esto no significa que no se practique ni que existan lugares excepcionales para poder disfrutar de ellos. Todo lo contrario, nuestra geografía cuenta con escenarios completamente idóneos para hacer sandskiing o sandboard en España.

Por ejemplo, en las dunas de la costa sur andaluza como en los arenales más altos en la isla de Gran Canaria se dejan ver de vez en cuando algunas personas deslizándose sobre sus esquíes o sobre su tabla sobre la arena. 

En Andalucía se puede practicar sandboard en el Desierto de Taberna, Almería (considerado el único desierto de Europa). También se puede realizar este deporte en Tarifa, Cádiz, en sus playas de dunas de arena. También, en esta misma costa, se puede encontrar un escenario ideal en la Playa de Bolonia o en Punta Paloma.

En las Islas Canarias, el mejor lugar para practicar sandboard son las Dunas de Maspalomas, en Gran Canaria. Hay varias empresas, de hecho, que ofrecen esta actividad en la zona. También, en las Dunas de Corralejo de Fuerteventura.

Cerca de España, la gran duna de Pilat, situada en la costa sur francesa, es otro de los escenarios más preciados por los que se están adentrando en esta nueva disciplina.

Sandskiing en el mundo 

A nivel mundial, uno de los territorios que más está explotando las posibilidades que ofrece el Sandskiiing es Perú. Los desiertos en los parajes de Huaral, Chilca e Ica, , consideradas las dunas a mayor altitud del mundo, son un paraje único que en los últimos años han potenciado su oferta turística con actividades como el sandskiing o sandboarding.

Sin embargo, en la última década los desiertos de todo el mundo han servido de pista. Las dunas de Marruecos pertenecientes al Sáhara, la arena de Egipto, o las dunas Kelso en el desierto del Mojave, la duna du Pilat en Francia o incluso en las zonas más empinadas y arenosas de los lagos y bosques cercanos a Moscú en Rusia.

Es más, en 2021, el Consejo Nacional de Turismo de Qatar lanzó una campaña específica para aquellos esquiadores y practicantes de snowboard que se perdieron sus vacaciones anuales en la nieve debido a las restricciones por la pandemia para poder deslizarse por las dunas de país.

Otras modalidades de esquí sin nieve 

De todos modos, en España en los últimos años también se han puesto en marcha otras alternativas al esquí alpino tradicional. La más popular son las pistas cubiertas y artificiales como es el caso de Xanadú en el sur de la Comunidad de Madrid.

Igualmente, en la localidad de Alcalá de la Selva, en Teruel, se ha llevado a cabo una iniciativa por la que se ha instalado una pista artificial y sintética de 100 metros de largo, 16 metros de anchura y un 15% de desnivel. Una infraestructura especialmente indicada para los más pequeños que permite la práctica de esquí en cualquier época del año.