Un GPS a bordo de aviones para predecir huracanes

Mar Gómez

Mar Gómez

Científicos estudian un GPS a bordo de los aviones para mejorar los modelos climáticos y la predicción de huracanes

¿Qué haríamos muchos de nosotros sin el GPS? Este innovador aparato diseñado inicialmente por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos no sólo nos permite localizar de forma muy precisa cualquier posición o lugar que queramos, sino que según un reciente estudio realizado por científicos de la Universidad de California (San Diego) también permite mejorar los modelos climáticos y la predicción de huracanes.

¿Cómo? Pues a través de un nuevo sistema de GPS a bordo de los aviones.

GPS en aviones

Imagen: Cortesía de la Universidad de California

Actualmente para hacer las mediciones en la atmósfera se utilizan señales de satélite GPS para tomar medidas que dependen de receptores fijados al suelo o de los receptores GPS en los satélites, por lo que no pueden tomar medidas precisas sobre el océano y sólo, de vez en cuando, cerca de las tormentas.

El nuevo sistema que han ideado en la Universidad de California permite tomar medidas precisas en estas zonas y sobre todo en zonas donde los huracanes se pueden desarrollar. Además, apuestan por equipar los aviones comerciales con este sistema para ampliar su red de medidas y poder mejorar la precisión.

Apuestan por equipar los aviones comerciales con este sistema para ampliar su red de medidas y poder mejorar la precisión

Pero, ¿cómo funciona un GPS? El GPS o Sistema de Posicionamiento Global se basa en 24 satélites en órbita sobre la tierra a nada más y nada menos que 20.200 km de altura que describen trayectorias sincronizadas para cubrir todo el planeta.

GPS

Imagen: Wikipedia

Pero no sólo esta red de satélites nos proporciona información útil sobre mediciones en la atmósfera. Un ejemplo que seguro que conocéis es el METEOSAT que da información meteorológica a África y Europa y cuya red de satélites se encuentra en órbita geoestacionaria.

A la hora de hablar de satélites meteorológicos hay dos tipos según su órbita: los geoestacionarios y los polares. Los satélites geoestacionarios se encuentran a casi 36.000 km de altura y permanecen quietos siguiendo el movimiento de rotación terrestre pudiendo emitir imágenes continuamente con sus sensores visibles e infrarrojos:

Meteosat

Imagen: Wikipedia

Los satélites de órbita polar en cambio se encuentran a  menos altura, 850 km, y se mueven de norte a sur pasando por los polos. Además debido a su cercanía presentan una mejor resolución.