El cambio climático está relacionado con el 45% de las muertes

El cambio climático genera situaciónes meteorológicas más extremas y junto al aumento de los contaminates se cobra millones de vidas al año

Mario Picazo

Mario Picazo

El cambio climático se ha cobrado la vida de millones de personas desde 1970. Así lo muestra un estudio realizado por la Sociedad Española y Portuguesa de Medicina Interna.

En él se advierte que la meteorología adversa capaz de generar inundaciones, sequías, y otros fenómenos extremos está relacionada con el 45% de las muertes.

El creciente uso de combustibles fósiles, ha seguido aumentando la concentración de gases de efecto invernadero y de determinados contaminantes atmosféricos. Ese exceso de gases no sólo está afectando el sistema climático de la Tierra, también de forma indirecta a la salud humana.

Los ingredientes de un impacto tan devastador

Los datos recopilados en el estudio señalan al cambio climático, tanto meteorológico como hídrico, como el responsable de la mitad de todos los desastres que hoy impactan a un amplio sector de la población.

En algunos casos, ese impacto puede ser intenso y persistente afectando la salud física y mental así como el bienestar psicosocial. 

Destacan las enfermedades zoonóticas, aquellas que se pueden transmitir entre animales y seres humanos. Este tipo de enfermedades pandémicas son cada vez más frecuentes y se transmiten a través de virus, bacterias, parásitos y hongos. Las enfermedades relacionadas con el agua se cobran anualmente 3.4 millones de vidas y las relacionadas con los alimentos 420.000.

Una parte importante de la pérdida de vidas humanas llega de las condiciones ambientales cada vez más extremas que experimentamos. Es el caso sobre todo en las grandes ciudades, donde año tras año aumentan la población.  

cambio climático
La calidad del aire se deteriora día a día a medida que aumenta la población sobre todo en las ciudades. Foto: Unsplash

A medida que una gran parte de la población global se instala en nuestras grandes urbes, también aumenta la exposición a la contaminación del aire y el calor extremo. Hay numerosos proyectos en marcha para hacer que nuestras ciudades sean más sostenibles pero aún queda mucho más por hacer en ese apartado.

Sólo los factores ambientales generan cerca de 13 millones de fallecimientos anuales, mientras que el calor extremo suma otros 5 millones. También hay que contar con la sequía cada vez más extrema en muchas zonas rurales del planeta, ya que es responsable de cerca de 10 millones de muertes registradas el siglo pasado.

Cambio climático: peor calidad del aire y más alérgenos

A nivel mundial, el exceso de muertes relacionadas con la contaminación del aire por partículas finas y ozono se estima que supera los 8 millones de personas. Más de la mitad de esas muertes se atribuyen a afecciones cardio metabólicas, en particular la cardiopatía isquémica.

El de la contaminación del aire es un problema que urge resolver sobre todo a medida que muchos nos instalamos en ciudades. Según los datos del informe, 9 de cada 10 personas respira aire con niveles de contaminación superiores a los límites que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS).

También complica la situación el progresivo aumento de los alérgenos. En comparación con 1990, hoy en día la temporada de polen comienza 20 días antes y se prolonga ocho días más de lo habitual. Además, la temporada es más intensa, con plantas, hierbas los árboles generando un 21% más de polen en el aire que hace 30 años.

La combinación de aire más contaminado y una mayor concentración de alérgenos está disparando los problemas de salud en muchos rincones del mundo. Se observa un importante aumento de las enfermedades cardiacas pero también de las cerebrovasculares, las pulmonares, las alergias y el asma

Nuevas estrategias sanitarias para afrontar un problema global

Según los expertos que han elaborado este informe, nos enfrentamos a un problema de salud global. Aunque cada país tiene un sistema de salud específico y en muchos es diferente al de otros, hay que consensuar estrategias en la medida de los posible. 

Los sistemas de salud deben trabajar para aumentar la resiliencia climática y la sostenibilidad ambiental. La Medicina Interna se posiciona en lo alto de la lista de especialidades que pueden hacer frente a estos desafíos. 

Los avisos tempranos y predicciones meteorológicas cada vez más precisas, pueden ayudar a que sanitarios del mundo entero estén preparados con tiempo para afrontar el impacto de una determinada situación climática o ambiental extrema. 

Como en otros campos, las nuevas tecnologías lideradas por la Inteligencia Artificial ayudarán a facilitar la toma de decisiones para buscar soluciones urgentes capaces de salvar millones de vidas.