El primer ciclón tropical de la temporada ya se está ‘cocinando’ en el Atlántico

La NOAA ha puesto bajo vigilancia un sistema de bajas presiones en el océano Atlántico. ¿Qué podría pasar con el ciclón tropical?

Mar Gómez

Mar Gómez

Los huracanes son uno de los fenómenos meteorológicos mas devastadores que existen. Conocidos así en la región Atlántica y Pacífica oriental, estos ciclones tropicales son objeto de seguimiento durante los meses estivales.

Oficialmente la temporada de huracanes en el Atlántico arranca el 1 de junio y termina el 30 de noviembre, pero ahora mismo, a finales del mes de abril, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha puesto sus ojos en la posible formación de un ciclón tropical en aguas atlánticas.

Ahora mismo está definida como un área de baja presión ubicada a unos 1.500 km al noroeste de las islas de Cabo Verde y que ha estado produciendo un área pequeña pero persistente de chubascos y tormentas al este de su centro desde este mañana.

Sin embargo, se pronostica que la baja se moverá hacia el suroeste en un área de vientos más fuertes en los niveles superiores pero, de momento, se espera ningún desarrollo adicional (10% probabilidad).

No obstante es interesante que es el primer sistema que se pone bajo vigilancia en esta primavera.

¿Cómo hace el seguimiento y predicción de ciclones tropicales la NOAA?

La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica utiliza una variedad de métodos para realizar seguimiento a posibles ciclones tropicales. Por ejemplo, utiliza una red de satélites meteorológicos para monitorear áreas propensas a la formación de ciclones tropicales.

Estos satélites proporcionan imágenes en tiempo real de las condiciones atmosféricas y del océano que pueden indicar el desarrollo de un ciclón tropical. Además despliega boyas oceanográficas en áreas propensas a la formación de ciclones tropicales para monitorear las condiciones del océano, como la temperatura de la superficie del mar y la velocidad y dirección del viento.

Por supuesto y aunque es un riego para todos los que se encargan de ello, la NOAA y la Fuerza Aérea de los Estados Unidos utilizan aviones equipados con instrumentos meteorológicos para volar dentro y alrededor de los ciclones tropicales, recopilando datos cruciales sobre su intensidad y trayectoria. Todo esto junto con los modelos informáticos permite prever la formación y el movimiento de los ciclones tropicales y, por lo tanto, salvar vidas.

huracanes consecuencia del cambio climático
Huracán visto desde el espacio.

Una temporada de huracanes 2024 muy activa

Las previsiones iniciales que han realizado apuntan a que esperamos una hiper actividad en la temporada de huracanes este 2024 en el Atlántico. Esto se debe entre otros factores a las temperaturas récord de la superficie del océano Atlántico tropical y subtropical oriental.

Los datos publicados en esta primera previsión del año, que se actualizará el 11 de junio, 9 de julio y 6 de agosto, apuntan a que se formarán en total 23 ciclones tropicales con nombre de los cuales 11 llegarán a ser huracanes. De esos, 5 podrían llegar a ser de intensidad 3 o superior convirtiéndolos en huracanes de mayor impacto.