Estado de los embalses: las zonas atlánticas notan la lluvia y aumentan su caudal
Las lluvias de las últimas dos semanas en zonas atlánticas se deja notar: el estado de los embalses mejora en estas zonas
Roberto Granda
El nivel de agua embalsada en España ha mejorado otra semana más. La subida viene marcada, especialmente, por las cuencas atlánticas, que han visto más lluvia estas dos semanas. Así pues, el estado de los embalses sigue mejorando, pero aún hay zonas en muy mala situación.
Estado de los embalses en España: nuevas subidas
A nivel general, el estado de los embalses en España está mejorando. Las lluvias, que en mayor o menor medida se han dado desde septiembre, han ayudado a mitigar la situación de bajas reservas hídricas. Sin embargo, esto no es común para todo el territorio peninsular.
Mientras en zonas atlánticas las reservas han aumentado de forma clara en algunas regiones, en otras lo hacen más tímidamente. Además, en las áreas mediterráneas, salvando el Ebro, la situación sigue siendo crítica en algunos lugares.
Las cuencas con mayores reservas en estos momentos son las del noroeste y norte peninsular. También es buena la situación en el Duero (75.3%) y en el Tajo (58.4%), aunque en esta última la situación es muy distinta en Cáceres o en Guadalajara, por ejemplo.
La realidad de las cuencas más azotadas por la sequía sigue siendo mala. En el caso del Guadiana y Guadalquivir, si bien hay subidas, ambas siguen muy lejos de sus medias de los últimos 10 años. Si continuaran las lluvias, podría llegar a solucionarse el problema de la sequía a nivel de embalses, pero recordemos que también es importante el estado de los acuíferos.
Las cuencas mediterráneas no remontan
Salvando el Ebro, que se encuentra actualmente al 70.5% y con una buena reserva en forma de nieve, el resto de cuencas mediterráneas presenta una situación delicada. En peor estado están las cuencas internas de Cataluña, con apenas 99hm³ acumulados. La próxima semana continuará la subida, por las aportaciones a La Sau, pero no mejorará sustancialmente.
En el caso del Segura y de las cuencas mediterráneas andaluzas, la situación también es mala. Si bien ambas han tenido subidas de varios hectómetros cúbicos en la última semana, siguen estando muy por debajo de años previos y de la media histórica.