Estado de los embalses en España: ¿paliarán las lluvias de esta semana la sequía?

Las reservas hídricas continúan bajando. El estado de los embalses empeora, pero llegan lluvias. ¿Serán suficientes para paliar la sequía?

Roberto Granda

Roberto Granda

Las reservas hídricas de uso consuntivo (esto es, sin contar generación hidroeléctrica) continúan bajando una semana más, dentro del marco de la fuerte sequía. El estado de los embalses empeora en España, pero hay lluvias a la vista. ¿Servirán de algo y paliarán la sequía en muchas zonas?

Estado de los embalses: cada vez menos agua

Las reservas de agua en España sufren una semana más un descenso, arrastradas por la ausencia de precipitaciones. Si bien las temperaturas son algo más contenidas que en semanas previas, las lluvias no llegan todavía a la mayor parte del territorio.

estado embalses 16 mayo

Así pues, como se puede apreciar, el estado de los embalses de uso consuntivo en la mayor parte de cuencas se sitúa en niveles bajos, y claramente por debajo de la media de los últimos 10 años. Las cuencas del norte están, en general, en mejor situación.

La peor situación la padece el Guadalquivir, con unas reservas de agua que apenas suponen el 24% de su capacidad total. Muy de cerca siguen las cuencas internas de Cataluña y la de Guadalete-Barbate, con 25.3% y 26.1% respectivamente.

Dentro de estas cuencas en tan mal estado, cabe destacar la situación de provincias como Córdoba, que apenas tiene el 18.3% de agua embalsada. No es la provincia que peor está, ya que Almería tiene unas reservas de agua del 11.6%.

En Cataluña, es Barcelona la que sale peor parada, con el 16.1% de sus reservas llenas. Otras provincias en muy mal estado son Jaén (26.9%), Cádiz (27.8%), Ciudad Real (28.3%), Murcia (28.4%) o Guadalajara (28.6%).

Esta mala situación se traduce en la «muerte» de algunos embalses, que ya no disponen de agua embalsada. En Córdoba el ejemplo más claro es el del embalse de Sierra Boyera (0 de 39 hm³). En Ciudad Real, La Vega del Jabalón está completamente seco (0 de 34 hm³), y El Vicario está prácticamente seco también (1 de 32 hm³).

¿Podrían las lluvias paliar la sequía?

Tenemos previsión de lluvias en el horizonte. Una serie de depresiones en niveles altos traerán un tiempo más revuelto a España. Durante esta semana lloverá, en forma de tormenta y chubascos, en el sur y este del país. También habrá lluvias en el Cantábrico.

De cara a las siguientes semanas, las previsiones semanales apuntan a un mantenimiento de cierta inestabilidad, con lluvias que podrían alcanzar más zonas. Así pues, ¿ayudarán estas lluvias a mejorar el estado de los embalses y paliar la sequía?

En primer lugar, debemos tener clara una cosa: las lluvias no arreglan la sequía, sólo la maquillan. La sequía es un problema estructural derivado de patrones atmosféricos y de los usos del agua. Así pues, su verdadero final pasa tanto por la llegada de lluvias como por repensar los usos. De lo contrario, en cuanto volvieran a escasear las lluvias volveríamos a la misma situación.

Una vez aclarado ese punto, podemos afirmar que, en cualquier caso, estas lluvias no son suficientes. Son lluvias en forma de chubascos y tormentas, locales e irregulares. No son lluvias abundantes, extensas y persistentes. Las tormentas pueden dejar muchos litros en poco tiempo, pero en muchos casos son lluvias poco aprovechables.

La mayor parte del agua que cae en tormentas o chubascos intensos se desplaza por escorrentía superficial. Puede ayudar a llenar embalses, pero no se infiltra en el terreno, y en este momento el contenido de humedad del suelo es muy bajo en la mayor parte del territorio. Además, estas lluvias intensas incrementan la erosión del suelo, acrecentando el problema de la ausencia de humedad.