¿La lluvia llenó los embalses? El mapa que evidencia que la sequía persiste en España
El estado de los embalses ha mejorado, con más reservas de agua en el conjunto de España, pero la sequía sigue presente en muchas zonas
Roberto Granda
Las lluvias de la última semana, asociadas a la borrasca Karlotta, han sido especialmente relevantes en zonas del oeste y sur peninsular. Los acumulados han incluso superado los 400mm en Grazalema (Cádiz). Sin embargo, ¿son suficientes estas lluvias? ¿Cuál es el estado de los embalses? ¿Se ha terminado la sequía?
El mapa del estado de los embalses: mejora (en general) pero no lo suficiente
Las lluvias de la última semana, si bien más destacadas en el oeste y sur, se han dejado sentir en la mayor parte de España. Gracias a ello, las reservas de agua de uso consuntivo (consumo, sin contar hidroeléctrico) se han incrementado en la mayor parte del país.
Las cuencas atlánticas del Tajo y Duero se encuentran ya sobre su valor medio de los últimos 10 años, aunque es verdad que la realidad no es igual en Cáceres, por ejemplo, que en Guadalajara (84% frente al 35%).
Las cuencas del Guadiana y del Guadalquivir se encuentran aún en mala situación. Si bien han registrado subidas, son pequeñas y no palian el grave problema existente en ambas. En el Guadiana se alcanza el 34.6% de agua embalsada, con mayor porcentaje en Badajoz que en Ciudad Real.
En el caso del Guadalquivir, el agua embalsada es de apenas el 23%, con provincias como Córdoba o Jaén en el 20% y 22.7%, respectivamente.
Las reservas se encuentran más bajas, y sin casi subir, en Guadalete-Barbate, las cuencas mediterráneas andaluzas, el Segura y las cuencas internas de Cataluña. Todas ellas se sitúan por debajo del 20%, destacando Guadalete-Barbate (15.5%) e internas de Cataluña (15.4%).
De momento no hay grandes lluvias a la vista
Las previsiones apuntan a que, si bien podríamos tener lluvias durante las próximas jornadas, no habrá lluvias de relevancia, persistentes y abundantes. Sin estas lluvias es poco probable que los embalses vean subir su nivel de forma notoria en la mayoría de cuencas.
Además, las situaciones atmosféricas que favorecerían a las cuencas mediterráneas, especialmente a las internas catalanas, no parece que vayan a producirse durante los próximos días.