Cómo hacer un uso sostenible de nuestro móvil y reducir la huella de carbono

De hace unos años a esta parte, especialmente tras la pandemia, nuestro consumo tecnológico ha ido en aumento.

Laura Opazo

Laura Opazo

Los datos indican que cada vez pasamos más horas frente a las pantallas ya sea para trabajo o por ocio. Se calcula que pasamos una media de 4,8 horas conectados a nuestros dispositivos móviles. Esta es la conclusión que extrae del informe del Estado Móvil 2022, publicado la compañía de análisis App Annie.

Eso sin contar con las 40 horas semanales de jornada de trabajo que pasamos frente al ordenador. Tampoco hay que obviar el tiempo que destinamos al consumo de plataformas audiovisuales en nuestro tiempo de ocio.

Cada vez tenemos más asumidos conceptos como huella hídrica o huella de carbono. Tanto es así, que ya es ampliamente conocido el impacto medioambiental que tiene, por ejemplo, la fabricación de un par de vaqueros (una de las cinco prendas más tóxicas de nuestro armario). Ahora toca conocer cuál es el impacto de nuestros móviles y descubrir consejos sobre el uso responsable del smartphone.

Un impacto del que no nos damos cuenta

Muchas veces desconocemos el impacto que generan estas acciones cotidianas. Aunque su huella parece más discreta, no por ello es menos lesiva y contaminante con nuestro entorno. Expertos de la Universidad Oberta de Catalunya (UOC) afirman que todos estos gestos contribuyen al aumento de la emisión de CO2 a la atmósfera.

Es más, se calcula que la huella de carbono digital supone casi un 2,8% de las emisiones totales. Por ejemplo, los datos apuntan a que las 47.000 búsquedas que se hacen en Google por segundo generan alrededor de 500 kilogramos de CO2.

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Las 47.000 búsquedas que se hacen en Google por segundo generan alrededor de 500 kilogramos de CO2. Imagen: Pixabay

Además, el consumo de vídeos online genera más de 300 millones de toneladas de dióxido de carbono anuales. Es decir, el 1% de las emisiones del mundo o el equivalente a las emisiones de gas de efecto invernadero de España en un año.

Lo más destacable es que parece que este gasto va en aumento. Los centros de datos donde se procesan todas nuestras transacciones digitales son los motivos de este gran gasto de energía. Si bien es cierto que estas compañías están tratando de reducir su impacto, conviene que poco a poco vayamos cambiando nuestra actitud.

Se calcula que la huella de carbono digital supone casi un 2,8% de las emisiones totales

Sobre todo, con respecto al uso de las nuevas tecnologías y con el objetivo de no contribuir negativamente en nuestro entorno.

Sin duda alguna, el móvil es uno de los dispositivos más utilizados entre la población. Sobre todo si tenemos en cuenta que puede estar encendido las 24 horas del día (algo que no sucede con nuestro televisor). Especialmente, para aquellos que hacen de las redes sociales su modo de vida.

Precisamente, por ser este el dispositivo del que más abusamos, os dejo por aquí unos consejos para hacer un uso más responsable de vuestro Smartphone y reducir vuestra huella de carbono digital.

Elegir con consciencia, clave para un uso responsable del smartphone

Lo fundamental antes de comprar un nuevo terminal es informarnos sobre las opciones más sostenibles que hay en el mercado. Además de elegir una opción respetuosa con el medioambiente, debemos elegir el más adecuado para nuestro día a día.

Por ejemplo, es posible que no necesitemos un móvil con una pantalla grande, pero si con más autonomía. Por esta razón, tal vez nos convenga un teléfono con una pantalla más pequeña que no consuma tanto.

Uso racional e inteligente de nuestro dispositivo móvil

Los móviles de hoy en día ofrecen muchas ventajas como chatear, enviar mensajes de texto, consultar nuestro email, etc. En contra, suelen consumir mucha energía y su vida útil media suele ser de 2 años.

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No hace falta esperar a que nuestro smartphone se descargue del todo para recargarlo. Imagen: Pixabay

Para optimizar su uso, es conveniente tener en cuenta una serie de puntos:
Bajar la luz a la pantalla y configurarla al 50%, ya que es el componente que más consume en un smartphone.
Desactivar las actualizaciones automáticas. Lo contrario puede hacer que tu móvil descargue e instale paquetes de apps varias veces al día, lo que consumirá una cantidad de energía importante.
Desactivar el modo vibración. Para ahorrar batería y aumentar su autonomía.
Evitar el envío de documentos adjuntos, ya que consumen energía consume y generan emisiones. Siempre que podamos, es más conveniente enviar enlaces porque ocupan mucho menos.
– Cuando hagamos una búsqueda en Google, tenemos que intentar usar palabras clave tan precisas como podamos.
Apagar los dispositivos cuando no se estén usando.
Cuidarlo con mimo. Un mal rendimiento de la batería es en ocasiones el motivo por el que el terminal se cambia. Cuando cargamos el móvil, es conveniente cargarlo siempre hasta que la batería esté completa pero evitar la sobrecarga. En cambio, no hace falta esperar a que se descargue del todo para recargarlo.

Otros consejos útiles para un uso responsable del smartphone

– Evitar, en la medida de lo posible, que nuestro móvil esté expuesto a temperaturas y humedades elevadas. El contacto con el agua y la exposición directa al sol puede hacer que la parte trasera del móvil se abombe. Esto produce un gas que hincha la batería y la degrada alterando sus componentes.

– Si además, lo protegemos con una funda y con un protector de cristal templado, conseguiremos evitar que la pantalla se fracture ante caídas inesperadas.


– Cuando ya no lo queramos o cuando el móvil empiece a perder prestaciones, debemos cambiar las piezas que sean sustituibles en vez de desecharlo directamente. Una batería de litio dura entre un año y medio y dos. Si la cambiamos podemos lograr que nuestro móvil amplíe su ciclo vital el doble de tiempo.
Optemos por la reutilización. Existen organizaciones, empresas o iniciativas que facilitan la reutilización de equipos.

– Si está estropeado de forma irreversible, llevémoslo a un punto de recogida de residuos electrónicos.