¿Dónde se ha quedado el invierno en Europa? El frío no llega

Llevamos ya más de un mes del invierno meteorológico 2022-2023, y salvando parte de diciembre, las temperaturas han sido suaves en Europa.

Roberto Granda

Roberto Granda

El invierno meteorológico comienza el 1 de diciembre y dura hasta el último día de febrero. Entrados ya en esta estación, en Europa, salvando días puntuales y la primera mitad de diciembre, el frío ha estado ausente. ¿Dónde se ha quedado el invierno de 2022-2023 en Europa?

Diciembre comenzó frío en algunos lugares

La primera quincena del invierno meteorológico vino marcada por una situación atmosférica dominada por un bloqueo atmosférico. Este bloqueo, que se desplazó desde Escandinavia hacia Groenlandia, favoreció la entrada de aire frío sobre buena parte de Europa. Las temperaturas fueron bastante bajas en algunos puntos, e incluso se llegó a ver la nieve en Londres.

No obstante, desde el día 16 aproximadamente la situación comenzó a cambiar. Las borrascas comenzaron a desplazarse más al norte, y en su avance empujaron masas de aire templadas y húmedas subtropicales sobre Europa.

Ya durante la Navidad, una dorsal se configuró sobre el Mediterráneo, acompañada de un anticiclón en superficie. Se extendió y desplazó hacia el norte, provocando una subida de las temperaturas notable en gran parte de Europa. La subsidencia asociada a la dorsal y cierto aire más templado arrastrado en su desplazamiento fueron las claves de esta subida térmica.

Esta situación ha propiciado que se hayan batido numerosos récords de temperatura máxima para diciembre en Europa, e incluso para enero. Los récords han sido numerosos, especialmente en Francia, Alemania y el entorno de los Alpes.

¿Dónde está el invierno este 2023 en Europa?

Ahora mismo, la situación continúa templada. Si bien las temperaturas han bajado y son más similares a las de la época, seguimos sin tener frío real en gran parte del continente. Además, la ausencia de precipitaciones combinadas con aire frío han hecho que los acumulados de nieve sean escasos en muchas de las cordilleras. ¿A qué se debe esta situación?

Durante finales de diciembre, la ausencia de lluvias y subida de las temperaturas fue debida a la presencia de la dorsal en altura y el anticiclón en superficie. Juntos favorecieron cielos despejados y temperaturas elevadas para la época, especialmente en zonas de montaña.

Actualmente, en enero de 2023, la situación es distinta. La dorsal se ha retirado, pero el aire frío y las precipitaciones siguen sin coincidir en Europa. Esto se debe a que tenemos una circulación atmosférica muy zonal, con borrascas desplazándose de oeste a este rápidamente y arrastrando consigo masas de aire más templadas.

invierno 2023 Europa zonal
Ejemplo de circulación rápida de bajas hacia el oeste, con el aire más frío retirado de Europa (tonos azules más oscuros)

Como los centros de acción no se han colocado en ningún momento para poder «bombear» aire frío a Europa, el escaso aire frío que llega tras los frentes de las borrascas es barrido rápidamente por la siguiente borrasca.

En los próximos días, no obstante, parece ser que podrían coincidir de forma algo más relevante aire frío y precipitaciones, lo que podría dejar importantes acumulados en los Alpes por encima de los 1500m de altitud.

Qué hay de la nieve y el invierno en España

Por lo pronto, en España parece que seguiremos sin invierno crudo. Las temperaturas serán algo más normales para la época del año, pero la nieve será escasa. Esta sólo hará acto de presencia en cotas relativamente altas de los sistemas montañosos de la mitad norte. La situación es muy diferente a la de hace 2 años, cuando la borrasca Filomena afectaba a la península y dejó su «gran nevada».