La población de abejas se reduce un 50% por amenazas como la sequía

Las abejas están cada vez más amenazadas por la actividad humana, el cambio climático y la sequía. ¿Qué podemos hacer para evitar su declive?

Elisabeth Lahoz

Elisabeth Lahoz

España se queda sin abejas melíferas. A las prácticas agrícolas intensivas, el abuso de pesticidas, las especies invasoras y las plagas que afectan a la colmena se suma ahora la ausencia de precipitaciones. La escasez de lluvia está provocando un alarmante declive en la población de estos polinizadores.

El cambio climático amenaza también a este insecto primordial para el medioambiente, y las sequías, cada vez más frecuentes e intensas, multiplican la pérdida de sus colonias. Organizaciones como COAG advierten de reducciones en el censo apícola de entre el 40 % y el 50 %. ¿Es viable un mundo sin abejas?

La sequía amenaza la cosecha de miel

«La polinización es un proceso fundamental para la supervivencia de los ecosistemas», dicen desde Naciones Unidas. Los polinizadores son indispensables para mantener la biodiversidad y, además, contribuyen a la seguridad alimentaria. Según datos de la propia ONU, más del 75 % de los cultivos alimentarios del mundo dependen en parte de la polinización.

En 2022 se registró una elevada mortalidad debido a enfermedades como la del ácaro varroa, el síndrome de despoblamiento de las colmenas (SDC) o los abejarucos. Las charcas vacías y una menor presencia de insectos por la escasa floración han convertido a la abeja melífera en el principal alimento de estas aves migratorias.

La sequía que se viene prolongando desde el pasado año está ocasionando asimismo importantes pérdidas en la cosecha de miel. La falta de lluvia ha derivado en una caída de más del 40 % en la producción de las colmenas, que afrontan una primavera seca y más cálida de lo normal.

La apicultura en nuestro país atraviesa una situación extremadamente complicada. La mitad de las colmenas están en peligro y el sustancioso descenso en la producción de miel y polen está llevando a que muchos apicultores opten por abandonar sus explotaciones.

Tres de cada cuatro cultivos que se producen en el mundo para consumo humano, como las manzanas, las fresas o el café, deben su existencia a las abejas y otros polinizadores. Fuente imagen: Pexels.

Soluciones para las abejas y la apicultura

¿Qué podemos hacer nosotros, en nuestro día a día, para ayudar a revertir esta situación? La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), así como asociaciones que actúan en defensa de la abeja como la Fundación Amigos de las Abejas, recogen una serie de recomendaciones para protegerlas tanto a ellas como al resto de los polinizadores. Estas incluyen:

  • Comprar miel pura local

    Adquiere miel cruda (sin refinar) de la región. Presta apoyo a los apicultores locales comprando miel, cera de abejas u otros productos de la colmena directamente a ellos.
  • Apoyar la agricultura sostenible

    Asimismo, compra productos a pequeños agricultores de la zona que sigan prácticas de cultivo sostenibles, menos dependientes de químicos tóxicos.
  • Cultivar plantas melíferas

    Las plantas y los polinizadores mantienen una relación simbiótica beneficiosa; se necesitan mutuamente. Proporciona a las abejas alimento cultivando árboles y plantas autóctonas en tu jardín, que florezcan en distintas épocas del año.
  • Crear fuentes de agua

    Facilítales agua limpia y un lugar de descanso. Coloca en tu terraza o balcón un recipiente poco profundo con agua y piedras, para que las abejas puedan beber sin que se ahoguen.
  • Evitar el uso de plaguicidas

    Si eres agricultor o propietario de un huerto o finca, respeta los enjambres y lugares de anidación y reserva algunas áreas no cultivadas de la parcela como hábitat natural, donde florezcan plantas silvestres para asegurar la polinización. Reduce el empleo de pesticidas, fungicidas y herbicidas, tratando de encontrar soluciones naturales a las plagas.
  • Tomar acción

    Apadrina una colmena, como proponen desde Ecocolmena, y participa en campañas e iniciativas de sensibilización para proteger a las abejas melíferas, así como a otros polinizadores como las mariposas, los colibríes o los murciélagos. Su declive nos afecta a todos.
  • Saber más sobre ellas

    Por último, trata de aprender acerca de las abejas y la apicultura. Comprender su mundo y su papel en la polinización para respetar a estas criaturas necesarias.

El calor y la falta de agua afectan a la floración. La sequía está despoblando las colmenas españolas y la producción de miel se ha reducido a la mitad. Una sequía que además se prevé larga. Pero las abejas no solo son necesarias para producir miel; la diversidad biológica y en última instancia nuestro sustento dependen de estos valiosos insectos.

Todas estas acciones contribuyen a salvaguardar a los polinizadores y asegurar su invisible pero inestimable servicio. La polinización —tal como señala la FAO— es esencial para la agricultura y los sistemas alimentarios, los ecosistemas saludables y, en definitiva, la vida tal como la conocemos.

VÍDEO: ¿POR QUÉ LAS ABEJAS SON VITALES PARA LA VIDA?