El cambio climático pone en jaque a las compañías de seguros
Las compañías de seguros ven cada día más complicado cubrir los gastos relacionados con desastres climáticos cada vez más intensos
Mario Picazo
El calentamiento del planeta está haciendo que los fenómenos meteorológicos sean cada vez más extremos en muchos rincones del mundo. Este hecho afecta a la vida de la población. Por lo tanto, es un escenario que de forma directa afecta al sector de los seguros y sus precios.
Cuanta más energía aportamos al sistema climático de la Tierra, más intensos se hacen algunos fenómenos como las inundaciones, las olas de calor, las sequías o los huracanes entre, otros muchos. fenómenos, que obligan a las compañías de seguros a subir sus tarifas y a limitar sus servicios.
Dos de los fenómenos que más afectan al precio de los seguros destacan las olas de calor y los incendios. Las primeras pueden causar las condiciones meteorológicas son propicias para los segundos. No sólo suben los precios de los seguros, también disminuye el número de coberturas y el impacto económico en algunos sectores es importante.
Aumentan las temperaturas y con ellas el riesgo de grandes incendios
Llevamos una década marcada por el intenso calor y los incendios en muchas zonas del planeta. Europa, Australia, el sudeste asiático e incluso los recientes incendios de Canadá. Son escenarios mucho más extremos que los inicialmente previstos con los cálculos realizados por modelos numéricos.
Desde los años 80, la temporada de incendios a nivel global se ha extendido en el tiempo un 27%. Ese aumento ha sido especialmente notable en el Amazonas, la cuenca del Mediterráneo y los bosques del oeste de Norteamérica.
Desde los años 80 la temporada de incendios a nivel global se ha extendido en el tiempo un 27%
Las predicciones apuntan a que la temperatura del planeta va a seguir subiendo, y aunque los números varían, podríamos llegar a calentar la Tierra hasta 2.7oC para finales de siglo. Con ese dato, aumentaría aún más el número de incendios por el mundo y sus características serían más extremas.
Los incendios se han convertido en una crisis para las aseguradoras
Aumentan los incendios y aumentan los dolores de cabeza para las compañías aseguradoras. En varios estados de Estados Unidos, algunas compañías de seguros han decidido no ofrecer a nuevos propietarios seguros de hogar o de oficina.
A medida que aumenta el riesgo de que se produzcan grandes catástrofes (sumado a los costes de construcción, junto con el cada vez más complicado mercado inmobiliario) ofrecer seguros ya no parece ser tan rentable.
California es uno de los estados que más incendios experimenta al año y está en el punto de mira de muchas compañías de seguros. Sólo durante la temporada de incendios 2017-2018, la industria de los seguros en el estado norteamericano perdió el equivalente a dos décadas de beneficios.
El riesgo de incendios forestales está aumentando drásticamente en Estados Unidos, lo que provoca reducciones en la cobertura de seguros en los estados más vulnerables. Imagen: First Street
Las inundaciones también están dejando huella en el sector de las aseguradoras
El tema de las inundaciones en aquellas zonas donde pueden aparecer huracanes también está calando en el sector. En Estados Unidos, Florida y Luisiana son dos de los estados más afectados por este problema.
A medida que los huracanes se hacen más fuertes y devastadores, las compañías de seguros se lo ponen más difícil a aquellos propietarios que tienen casas en lugares costeros de alto impacto. Huracanes más intensos, implican un aumento de la marea ciclónica costera y vientos más intensos.
El estado de Luisiana es quizá el que más vive de cerca está crisis. Las temporadas de huracanes, especialmente activas de 2020 y 2021, han obligado al gobierno estatal a ofrecer millones de dólares en subsidios para atraer a las compañías aseguradoras.
Soluciones de futuro para una mejor gestión de los riesgos climáticos
Las mejoras en el sector de los seguros implican mejoras en los sistemas de alerta temprana y la implementación de nuevas tecnologías. Entre ellas, destaca la inteligencia artificial, que está mejorando la predicción y la mitigación del cambio climático.
Para que esas mejoras se materialicen hace falta potenciar las inversiones en infraestructura de adaptación. Un elemento fundamental para proteger a las comunidades y las economías de los peligros climáticos.
La inversión en adaptación ya está en marcha por ejemplo el estado de California. Allí las nuevas regulaciones desalientan la construcción en áreas propensas a incendios. También se incentivan los techos resistentes al fuego y los espacios no combustibles en la parte inferior de las paredes de las casas.
En el apartado comercial para potenciar la inversión en adaptación, este es el momento óptimo para invertir. Los peligros climáticos alimentados por el calor ya están causando 202 millones en pérdidas por día.
Además, las predicciones de futuro apuntan que los riesgos climáticos podrían amenazar 80 millones de empleos a tiempo completo para el año 2050.
Sólo este 2023 siete desastres relacionados con el cambio climático en Estados Unidos ya han causado más de mil millones de dólares en daños. Es bastante probable que estas cifras aumenten en un futuro, a medida que las temporadas de incendios forestales se hacen más intensas y duraderas.