Situación de los embalses en España: la sequía sigue agravándose

El estado de los embalses en España continúa empeorando. Las reservas siguen bajando en el conjunto del país, sin grandes lluvias a la vista.

Roberto Granda

Roberto Granda

Las reservas hídricas en España continúan su imparable descenso. El estado de los embalses empeora, con cada vez menos reservas de agua y sin lluvias generalizadas y relevantes en las próximas jornadas. A ello se suman las elevadas temperaturas, que si bien no son como las de abril, siguen siendo elevadas para la época del año.

Estado de los embalses a 2 de mayo en España

Las reservas hídricas superficiales en España continúan bajando. El agua almacenada en embalses es, una semana más, más baja que en las previas. Las reservas en el conjunto del país se sitúan en el 41.4%, un 36% por debajo de lo que sería normal para estas fechas.

estado embalses 2 mayo España
Todas las cuencas salvo la del Júcar se encuentran por debajo de sus medias a 10 años. Mapa: Eltiempo.es

Por provincias, se encuentran por debajo del 20% en Barcelona, Almería y Córdoba. En todas ellas la situación es crítica, llegando en el caso de Córdoba incluso a tener un embalse en estado muerto: el embalse de Sierra Boyera, en el norte de la provincia.

Otras provincias con muy mal estado de sus embalses son Jaén, Murcia, Ciudad Real o Guadalajara, todas ellas por debajo del 30%. En Ciudad Real ya hay embalses muertos, mientras en Jaén, y especialmente en Guadalajara, las reservas bajan de forma acusada esta última semana.

Algunas de las otras provincias con muy mal estado de sus reservas son Badajoz, Alicante, Granada, Sevilla, Cádiz o Girona. Todas ellas están alrededor del 30% de agua embalsada, pero sus reservas descienden rápidamente con la ausencia de lluvias y las elevadas temperaturas.

La sequía puede agravarse de forma acusada si no llueve en mayo

Si el mes de mayo no trae lluvias, y de momento no parece que ni a corto ni a largo plazo vayan a llegar lluvias abundantes y extensas, la situación puede complicarse. La actual sequía de largo plazo es severa, poniendo estrés no sólo sobre las reservas hídricas, sino también sobre el medio natural.

El bosque mediterráneo está fuertemente adaptado a la sequía, pero la actual combinación de ausencia de lluvias y altas temperaturas la pone al límite. En muchos lugares, la vegetación podría verse muy afectada, pudiendo incluso no llegar a superar el verano si no llueve de forma relevante en las próximas semanas.