Los peores desastres medioambientales que hemos vivido en 2023

El año 2023 ha estado marcado por una serie de desastres medioambientales que han causado graves daños a la naturaleza y a las comunidades humanas. Estos han sido causados, en su mayoría, por una combinación de factores, entre los que se encuentran el cambio climático, la actividad humana y los fenómenos meteorológicos extremos.

Si echamos la vista atrás, probablemente necesitásemos los dedos de varios pares de manos para enumerar la cantidad de tragedias que hemos vivido a lo largo de este año. Sequías, inundaciones, incendios forestales y un largo etcétera.

Para analizar la magnitud de estos eventos, hemos hecho un repaso por algunos de los peores desastres medioambientales que el 2023 nos ha deparado.

Incendios forestales, cada vez más frecuentes y agresivos

Así es. En Europa, los incendios forestales más graves se han registrado en Portugal, España, Francia e Italia. En los dos primeros, los incendios han causado la muerte de más de 35 personas y han arrasado más de 84.546 hectáreas entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2023 en España y Portugal.

Hasta septiembre, se habían registrado unos 87 incendios, siendo el más grave de todos el de Tenerife, sobrepasando las 15.000 hectáreas. Sólo en los primeros tres meses del año, se estimó que los incendios forestales en España habían arrasado cerca de unas 32.000 hectáreas.

Según el comisario europeo de Gestión de Crisis, 2023 fue el año con los peores incendios en Europa. De hecho, el Mecanismo de Protección Civil de la Unión Europea se activó hasta diez veces, concentrando un total de 27 aviones, 1 helicóptero y alrededor de 1.700 bomberos.

Fuera de nuestras fronteras, fuertes vientos y altas temperaturas provocaron decenas de incendios forestales en el centro y sur de Chile. Argentina es otro de los países más afectados por el cambio climático, con diversos focos de incendios forestales que amenazan a la provincia de Córdoba desde hace meses. La cosa no acaba ahí.

En Estados Unidos, se han superado por primera vez las pérdidas aseguradas de 50.000 millones de dólares por la actividad de tormentas severas. Las pérdidas económicas totales por catástrofes naturales en el primer semestre de 2023, no solo las cubiertas por seguros, alcanzaron los 120.000 millones de dólares.

La sequía alcanza nuevas cotas alarmantes

A los incendios de sexta generación se le suma la escasez de agua que la mayoría de países sufren a nivel global. En términos generales, año hidrológico ha sido seco en España, con un 11% menos de lluvias, lo que lo convierte en el sexto más seco en lo que va de siglo. De acuerdo a los datos, el actual período de sequía es el peor desde al menos 1970 en varias zonas de España.

Es un hecho, la sequedad del suelo y la falta de lluvias han prolongado la temporada de incendios de marzo a noviembre, con incendios forestales cada vez más violentos. La falta de precipitaciones se ha notado con mayor fuerza en el sur y el este de la Península Ibérica, convirtiéndose en un gran problema en estas zonas. Los bosques mediterráneos, entre los de mayor riesgo de morir por sequía.

A fecha de hoy, los embalses de Extremadura cuentan un total de 6.987 hm³ de agua embalsada, lo que representa el 48,37% de su capacidad total, con una variación semanal de 123 hm³. De hecho, la provincia de Badajoz se ha mantenido a lo largo de este año por debajo del 29%. En España, la reserva hidráulica total sube más de un punto hasta un 45,7% tras aumentar 615 hm³ durante la última semana.

En cuanto al resto de la geografía, la gran mayoría de los países que enfrentan un gran riesgo de sequía están en África, aunque también hay ejemplos en Europa y Oceanía. Asimismo, un estudio del Observatorio Global de la Sequía revela que las cantidades promedio de precipitación se han reducido entre un 30% y un 90% en el este de Brasil, las costas de Venezuela, Ecuador y Perú, y el sur de Chile y Argentina.

La Organización Mundial de la Salud estima que más 50 millones de personas en todo el mundo se ven afectadas por las sequías cada año. Por último, las catástrofes naturales relacionadas la sequía han tenido un impacto económico con pérdidas aseguradas de alrededor de 6.000 millones de dólares.

Inundaciones menos intensas, pero con el mismo componente destructivo

El año pasado estuvo marcado por diversos episodios de inundaciones a lo largo de la península. Las más impactantes que España ha sufrido este 2023 se produjeron en la segunda quincena de septiembre, como consecuencia de una DANA que afectó a gran parte del país.

Las lluvias torrenciales, que llegaron a superar los 100 litros por metro cuadrado en algunas zonas, provocaron inundaciones en numerosas localidades, especialmente en las regiones de Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Aragón y Navarra.

Las inundaciones más graves se produjeron en Madrid y Toledo, dejando tres personas muertas y tres desaparecidas, además de registrar daños materiales por valor de millones de euros. Los avisos naranja por lluvias torrenciales fueron una constante durante la primera quincena de septiembre, incluyendo las zonas de Euskadi, Navarra, Barcelona, Tarragona, Castellón, Valencia, La Rioja, Soria, Ibiza y Formentera.

En el resto del mundo, la situación ha sido bastante diferente, causando decenas de muertes en zonas de toda la geografía. En Italia, una tromba de agua arrasó el centro del país con 10 muertos y cuatro desaparecidos, mientras que en Sudáfrica, más de 300 personas han muerto por las peores inundaciones en décadas. Eso por no hablar del tornado que dejó 13 muertos en Argentina hace unos días tras una fuerte tormenta.

En Filipinas, al menos 6 personas han muerto y 19 están desaparecidas tras las graves inundaciones que han afectado al país en las últimas semanas. En el Himalaya, al menos 40 personas han muerto y 75 están desaparecidas tras el desbordamiento de un lago glaciar en el norte de India. Por su parte, República Dominicana registró 30 muertes tras las lluvias del mes de noviembre.

Otros desastres medioambientales registrados en 2023

No podemos dejarnos en el tintero algunos de los hechos más importantes de este año. Hace unos días, pudimos saber que Doñana salía de la lista verde de la UICN por mala gestión. La falta de recursos hídricos por sobreexplotación y una protección que ha sido criticada incluso por la Comisión Europea han contribuido a este hecho.

En lo que a biodiversidad se refiere, este año, 208 especies de las 80.000 que el Ministerio para la Transición Ecológica tiene registradas están en peligro de extinción, junto a otras 137 que se estiman vulnerables. Más del 60% son plantas, mientras que el resto se corresponde con aves y animales invertebrados, con un 12% y 9,6% respectivamente.

Por otro lado, el cambio climático ha causado impactos y daños generalizados e irreversibles en España, según el informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático. En concreto, el 96% de la población española ha respirado aire de emisiones contaminantes por ozono en 2023, afectando a 502.000 kilómetros cuadrados del territorio.

Entre los agentes contaminantes, se incluyen partículas de dióxido de nitrógeno y dióxido de azufre, ambas especialmente perjudiciales para la salud. A esto hay que sumarle el aumento generalizado de la temperatura media global, siendo el octubre más cálido desde que se tienen registros.